El presidente Javier Milei recibió este mediodía a cinco gobernadores
afines al PRO en la Casa Rosada para consensuar algunos puntos de la letra
chica del presupuesto 2025, que se encuentra en pleno tratamiento en comisión
en la Cámara de Diputados, con una negociación en espejo con el Senado.
A las 12.30 horas fue que llegaron a la explanada de la Casa
de Gobierno los mandatarios Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres
(Chubut), Jorge Macri (CABA), Claudio Poggi (San Luis) y Marcelo Orrego (San
Juan). Por el lado del oficialismo estuvieron el jefe de Gabinete, Guillermo
Francos; la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; y el vicejefe
de Gabinete, Lisandro Catalán.
Desde el entorno de los cinco asistentes calificaron a la
reunión como "buena y positiva". Los gobernadores le reclamaron a
Milei por varios acuerdos a los que la Casa Rosada no está cumpliendo.
En ese listado estuvieron la deuda de Anses con las cajas de
jubilaciones provinciales no transferidas, la reactivación de las obras
públicas nacionales y el pago de la compensación por el Consenso Fiscal 2017;
todas cuestiones que tienen incidencia en la proyección del gasto para el año
próximo.
"Hubo un compromiso de seguir trabajando de manera
conjunta con el presupuesto nacional y la necesidad de llegar a un consenso
para que sea sancionado en el Congreso", dijeron cerca de un mandatario
del PRO. Vinculado a eso, tanto Nación como las cinco provincias quedaron en
seguir trabajando en el Congreso para avanzar en la letra chica.
También hubo otros asuntos tangenciales: "Se habló del
rumbo de la economía: inversiones, comercio, la baja del riesgo país y la
relación con China", confirmaron cerca de varios gobernadores. Uno de los
puntos que copó la reunión -de más de dos horas de duración- fue la
reactivación de rutas. Según trascendió, Milei le dio importancia a explicar el
rumbo económico y las medidas que tomó el gobierno para bajar la inflación y
bajar el riesgo el país.
Previo a la reunión encabezada por Milei, el jefe de
Gabinete, Guillermo Francos, dijo a periodistas de la Casa Rosada que "no
es la intención del gobierno invertir recursos nacionales más allá de las obras
que se ha comprometido desde el sector nacional".
Tanto Frigerio como Torres participaron la semana pasada de
un panel de gobernadores en el Coloquio de IDEA, en donde mostraron apoyo al
planteo de déficit cero que impuso Milei, pero la consideraron una condición
insuficiente para el desarrollo. "Discutamos cómo se reparten los tributos
y los financiamientos en Argentina", dijo Frigerio.
"Por Constitución, todos los impuestos son
coparticipables. Si no lo son, es porque se decidió que tengan una asignación
específica. Muchas provincias aportamos a la Anses a través de la no
coparticipación del impuesto al cheque, de una parte del IVA y de los impuestos
a los combustibles y no recibimos nada de eso este año", ejemplificó, para
agregar con un pedido explícito al gobierno por inversiones en obras de
vialidad.
Durante los últimos meses, los cinco mandatarios mostraron
colaboración con La Libertad Avanza en el Congreso Nacional, pero pretendían
mejoras para sus provincias en la redacción del proyecto presupuestario.
El vínculo del gobierno con los gobernadores cambiemitas
Quienes vinieron este jueves son cinco de los diez
gobernadores de Juntos por el Cambio, la coalición que emergió (primero como
Cambiemos) en 2015, siguiendo en 2019 y 2023 como espacio electoral y de
coordinación política.
El espacio de gobernadores cambiemitas sigue pese a que en
el Congreso ya quedó extinta esa alianza. "En el único espacio que todavía
no está roto la marca Juntos por el Cambio es en el grupo de los 10
gobernadores. Pero se la vamos a cambiar el nombre. No existe más", decían
cerca de un mandatario provincial que asistió hoy a la Casa de Gobierno.
Hay varias razones que explican las diferencias al interior
de Juntos por el Cambio. Una es la desconexión total entre las conducciones del
PRO y la UCR Nacional, a cargo de Mauricio Macri y Martín Lousteau,
respectivamente; el primero, con predisposición a colaborar con Milei, y el
segundo posicionándose como férreo opositor de los libertarios.
Esto también sucede al interior del radicalismo, con
gobernadores con mayor afinidad con la Casa Rosada (como Alfredo Cornejo, de
Mendoza) y otros que tienen una distancia mayor en términos ideológicos (como
Maximiliano Pullaro, de Santa Fe; de estrecho vínculo con Lousteau).
En un comienzo la reunión fue trascendida como una con
gobernadores de Juntos por el Cambio. Finalmente, se circunscribió a una sin
los mandatarios radicales. "Preferimos hablar con los del PRO primero. Una
reunión de a diez sería muy complicada y, además, hay un bloque más homogéneo
en términos ideológico con estos cinco gobernadores", dijeron desde el
gobierno.
"A Javier [Milei] no le gustan mucho estas reuniones de
relacionamiento con gobernadores, pero sabe que hay que hacerlas por un
objetivo superior", afirmó una alta fuente de Casa Rosada. Entre los
principales planteos que se repiten entre todos los mandatarios están las cajas
previsionales, la reactivación de obra pública nacional y mayores fondos en
otros conceptos.
A pesar de que no desmienten un distanciamiento evidente con
algunos de los gobernadores radicales, pareciera ser que no es un encono con el
radicalismo en sí.
Incluso, el Ejecutivo volvió a armar la habitual mesa
legislativa con el PRO e invitó a varios diputados de la UCR -entre ellos, al
jefe de bloque, Rodrigo de Loredo-; aunque no asistió la facción que responde a
Facundo Manes y Martín Lousteau que está distanciada por completo de los
libertarios. Horas después de ese encuentro, la facción paloma de los radicales
anunció que armaría un bloque aparte.
A pesar de que una caída del presupuesto significaría que se
debería hacer una nueva prórroga y que el oficialismo podría tener la
discrecionalidad total sobre el manejo de los recursos, en Presidencia
reconocen que no es un signo positivo de cara a discusiones más elementales con
organismos multilaterales o con inversores. En tanto, buscan generar
certidumbre a partir de un pacto del presupuesto con diputados y senadores
aliados.
Por eso este lunes Milei hizo una cena con cuatro
gobernadores alineados como Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca),
Hugo Passalacqua (Misiones) y Gustavo Sáenz (Salta). La reunión tuvo puntos
positivos, aunque algunos de ellos dijeron en privado que no se llevaron muchas
conclusiones por el debate de fondos.