Apenas unas horas después de la aprobación del Presupuesto 2023 en Diputados, el rionegrino Luis Di Giacomo presentó el proyecto para eliminar las primarias. En el Frente de Todos, en principio con las posiciones divididas sobre si mantener o suspender las PASO, buscarán definir en las próximas horas si impulsan el tratamiento.
El legislador, que responde a Alberto Weretilneck, ya tenía preparado el texto, aunque el oficialismo prefirió evitar las controversias sobre las primarias hasta que el Presupuesto pasara al Senado. En un momento, referentes de Juntos por el Cambio habían dejado trascender que no le darían la herramienta de la administración al Gobierno si en paralelo el Frente de Todos avanzaba con una jugada para potenciar las internas en la principal coalición opositora.
En el oficialismo se limitaron a transmitir que en las próximas horas evaluarán la estrategia, sin descartar darle impulso al proyecto. "Tenemos algunos que quieren mantener las PASO, otros que sí o sí las quieren sacar y una ancha avenida del medio que duda. Va a hacer falta mucho análisis. Vamos a reflexionar y decidir con frialdad la conveniencia de cada paso que demos”, dijo una espada parlamentaria del oficialismo a Clarín.
"Hay que hacer un análisis político sobre pros y contras, en función de eso tomar una decisión que tiene que ver con una estrategia política y después de eso ir ordenando la cuestión de los votos”, agregó.
Una primera medida para advertir la posición del Gobierno será el giro a las comisiones, en especial si le dará la cabecera a una comandada por el Frente de Todos para manejar los tiempos del debate, y si confirma una convocatoria para la semana próxima. El proyecto propone derogar el Título II de la Ley 26.571, el que trata sobre las primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias.
“Se ha desvirtuado la finalidad de las PASO, porque mientras que algunos las ven como una 'interna' financiada por el Estado, otros las critican por configurar una elección general 'anticipada'”, sostiene Di Giacomo en los fundamentos del proyecto, que lleva las firmas del también rionegrino Agustín Domingo y los misioneros Diego Sartori y Carlos Fernández. Los cuatro integran el interbloque Provincias Unidas, aliado del oficialismo.
"Saben que se les viene una paliza en las urnas y reaccionan yendo en contra de los derechos de la ciudadanía. Tienen miedo a la voz del pueblo. Lucharemos para defender la democracia", tuiteó Mario Negri, jefe del bloque de diputados radicales, uno de los primeros en salir al cruce.
Desde que los gobernadores impulsaron la idea, en Juntos por el Cambio se encendieron las alarmas por las dificultades que generaría en la coalición opositora la eliminación de las PASO en el caso de que el Frente de Todos cierre filas en esa dirección y consiga los votos en Diputados, la Cámara más adversa para el oficialismo en el Congreso.
Conscientes de las complicaciones para acordar un método alternativo para definir las candidaturas el año próximo, incluso alertaron sobre el riesgo de una ruptura. "Armar una interna propia es carísimo y alguno puede no aceptarla. Si Macri decide presentarse porque piensa que con su núcleo duro tiene chances de llegar al balotaje, ¿por qué no va a aparecer otro que piensa lo mismo y también se anota?", descontaron un escenario incierto que generó preocupación.
De cualquier modo, el Frente de Todos tendrá primero que resolver su propia interna. Alberto Fernández rechaza la eliminación de las PASO, con el propósito de mantener alguna perspectiva de competir para intentar su reelección, una posibilidad que desestimó Máximo Kirchner esta semana. A principios de octubre La Cámpora, a través de Andrés Larroque, se había expresado a favor de discutir la eliminación.
"Perdieron su sentido original. No podemos tener dos elecciones para una misma cosa", había dicho el ministro de Desarrollo bonaerense. Fue luego de que Leandro Santoro, Marcelo Casaretto y diputados de las organizaciones sociales se pronunciaran en contra de suspender las primarias.
En el caso de que Frente de Todos unificara una postura para avanzar tendrá que reunir los votos en Diputados. Además de los cuatro aliados que firmaron el texto, el proyecto podría contar con el aval de los legisladores que responden a Juan Schiaretti.
Las posturas de Javier Milei, Victoria Villarruel y Carolina Píparo podrían ser determinantes para alcanzar la mayoría especial de 129 votos, por tratarse de la reforma de una ley electoral. Por el momento, el economista liberal esquivó una definición.