La acusación de Nahir Galarza contra su padre Marcelo, a quien apuntó de ser el asesino de su ex novio Fernando Pastorizzo, mantiene en vilo al país. Ante la repercusiones, el hombre dio su versión, en la que negó haber cometido el crimen, aunque reconoció que pensó "en hacerse cargo" del crimen cuando su hija fue detenida.
“Yo no lo maté. Me estoy enterando por ustedes. No sé qué decir. Todo esto es muy fuerte, que mi hija diga que yo fui el asesino. Igual, algo me veía venir”, dijo Galarza al sitio Infobae apenas minutos después de conocerse que Nahir le pidió a su abogada Raquel Hermida Leyenda que denuncie a su padre por el homicidio.
Y agregó: “Ahora dicen que puedo matar a mi familia, que maté a este chico, que soy lo peor. Confieso que en un momento pensé en hacerme cargo, pero el abogado me dijo que no había forma. Creo que lo mejor es irme al campo un tiempo. No voy a contradecir a mi hija, ni voy a hacer nada que la perjudique, todo lo que sea mejor para ella será bienvenido”.
Hermida Leyenda denunció ante la Fiscalía Criminal de Turno en Paraná a Galarza y acusó a los fiscales y abogados que lo protegieron y la condenaron. También denunció a un tío de la joven por haber abusado sexualmente de ella.
De acuerdo al relato de Nahir a su abogada, su padre le disparó a Fernando cuando estaba en el piso tras aparecer intempestivamente en la escena donde estaba ella con su ex novio. Para la abogada, Marcelo está "muerto de miedo".
"En primer término porque se descubrió la verdad. Porque su hija a través de mucho tiempo de terapia pudo hablar”, aseguró.
“(Nahir) no le tiene miedo porque está cuidada al estar detenida. La cárcel para ella es un lugar de seguridad. El padre tiene miedo porque si declara la verdad sus encubridores van a matarlo. Un fiscal, un hombre de la policía y un hombre con contactos políticos van a caer y, por lo tanto, Galarza no va a encontrar nunca la paz”, sostuvo.