Este miércoles, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) informó que la jueza María Servini postergó para el 17 de septiembre la indagatoria del gendarme Héctor Guerrero, acusado de dispararle al fotógrafo Pablo Grillo durante una movilización ocurrida a mediados de marzo.
“Estamos a la espera del informe pericial sobre el disparo que Guerrero propinó directo a la cabeza de Pablo, en contravención de los protocolos establecidos para el uso de estas armas”, señaló la organización no gubernamental dedicada a la promoción y defensa de los Derechos Humanos y la Justicia en su comunicado.
Por su parte, el fotógrafo y militante político continúa su recuperación en el Hospital de Rehabilitación Manuel Rocca. Según se ha informado, a pesar de que su estado general es estable en terapia intensiva, su evolución neurológica se ha estancado y no presenta mejorías significativas.
Grillo debió ser internado de urgencia a mediados de marzo de este año tras recibir el impacto directo de un gas lacrimógeno en la cabeza, disparado por fuerzas de seguridad durante una manifestación frente al Congreso, lo que le causó una fractura de cráneo y pérdida de masa encefálica.
“No está teniendo la evolución que se espera”, indicaron a través de la cuenta “Justicia por Pablo Grillo”, administrada por su familia y amigos. Esta noticia llegó poco después de que se le realizara una cirugía para colocarle una prótesis craneal.
La investigación relacionada con el ataque a Pablo Grillo está bajo la dirección de la jueza María Servini, titular del Juzgado Criminal y Correccional Federal N°1, y es supervisada por el fiscal Eduardo Taiano. Aunque la causa enfrenta las demoras características del sistema judicial argentino, continúa su desarrollo y, según su hermano Emiliano Grillo, “avanza lento, pero avanza”.
Con el apoyo de organismos de derechos humanos, como el CELS y la Liga Argentina de Derechos Humanos, la familia solicitó la indagatoria del gendarme Héctor Jesús Guerrero, señalado como responsable del disparo que lo hirió, identificado a partir de fotos y videos de la escena. Sin embargo, esta investigación presenta irregularidades, ya que los videos y audios proporcionados por Gendarmería son incompletos.
Desde la causa judicial se ordenó una pericia para determinar la trayectoria del disparo que hirió a Grillo, efectuándose de manera irregular, ya que el gendarme identificado no siguió los protocolos y disparó en línea recta hacia la multitud. A raíz de esto, el lunes 11 de agosto se llevó a cabo la reconstrucción de los hechos con la presencia de la Policía de la Ciudad, que tomó medidas y fotografías para el informe oficial del caso.
Cómo sigue el estado de salud de Pablo Grillo
Durante el último parte médico se detalló que “el ventrículo cerebral derecho, por donde circula el Líquido Cefalorraquídeo (LCR), está dilatándose más que el izquierdo“, lo que genera una acumulación desigual de líquido que podría afectar el funcionamiento de esa área del cerebro, que se encuentra menos protegida y expuesta a presión o daño.
El equipo médico también identificó que “la válvula que regula el LCR no está funcionando correctamente“, lo que permite que el líquido cefalorraquídeo se acumule en exceso, dilate los ventrículos y eleve la presión dentro del cerebro. Para controlar esta situación, los especialistas decidieron cerrar la válvula manualmente mediante una pequeña incisión, como parte de un tratamiento de emergencia destinado a prevenir daños adicionales.
A pesar de las complicaciones, la familia destacó algunos avances positivos en su recuperación, ya que Pablo muestra mejoras en movilidad y ciertos gestos, como comentarios irónicos, que los médicos consideran alentadores. Sin embargo, continúa enfrentando dificultades, especialmente en la deglución, y requiere cuidados especializados de manera constante, mientras sigue con su proceso de rehabilitación bajo la supervisión del equipo médico.
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