
La convulsión en el PRO es de tal magnitud que resulta difícil medir a esta altura hasta dónde llegará su crisis, producto de graves errores propios y del poder conquistador del mileísmo.
Un nuevo aporte a la confusión general se desarrolla por estos días otra vez en el centro neurálgico amarillo, la Ciudad de Buenos Aires. Apenas a una semana del cierre de alianzas para las legislativas nacionales del 26 de octubre, el PRO gobernante porteño, debe definir aún qué coalición arma.
Ya está prácticamente desechada la posibilidad de repetir la estrategia ejecutada para los comicios locales adelantados de mayo. Allí, el PRO fue solo y por primera vez perdió y quedó tercero en casi dos décadas.
Ese resultado, además de multiplicar tribulaciones internas que están lejos de resolverse, condiciona la decisión que ahora debe tomar. CABA es uno de los ocho distritos que elige sus representantes al Senado. Las tres bancas en juego (dos que ocupaban el extinto Juntos por el Cambio y una del peronismo) se las repartirán las dos fuerzas con más votos. Para la tercera, nada.
Como síntoma del grado de descomposición, los dos referentes del PRO en la Ciudad entraron en una sorda disputa. Sumaron conflictos en los últimos meses, centrados en la estrategia electoral, la marcha de la gestión porteña y la relación con la administración de los hermanos Milei.
Así, el vínculo político entre los primos Macri, el jefe de Gobierno Jorge y el expresidente Mauricio, atraviesa su peor momento. El último domingo, aquí en PERFIL, Ezequiel Spillman brindó nutridos detalles al respecto: Crece la distancia entre los Macri: una renuncia clave en la Ciudad y un nuevo rol para Ritondo
Abundan los pases de factura entre ellos, vía cara a cara (cada vez son más esporádicos y ásperos sus encuentros) o a través de sus allegados. El expresidente de Boca, el influyente Daniel Angelici, intentó mediar, pero ya mandó señales de que esa intervención parece lucir como una misión imposible. Y él no es Tom Cruise.
Para limitar las diferencias en el terreno electoral, Macri Mauricio preferiría un acuerdo con La Libertad Avanza, parecido al que se activó en las provincias de Buenos Aires, Mendoza y Entre Ríos.
Por eso le pidió a Cristian Ritondo, jefe del bloque de diputados PRO y protagonista del acuerdo bonaerense, que explore las chances de una negociación con los libertarios para la Ciudad.
Macri Jorge descree que sea el mejor camino. La hermanísima Karina Milei y su delegación porteña no paran de denostar el rol del jefe de Gobierno. La idea de compartir una lista encabezada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich (como ya sucedió en 2023), genera algo de escozor.
De ahí que Macri Jorge propicie por estas horas la resurrección de una remozada versión de JxC. Con radicales, lilitos, socialistas, peronistas no K y otros grupos. Incluirían a Horacio Rodríguez Larreta, que dio la sorpresa en mayo yendo por afuera.
Mañana, jueves 31, se reunirá la asamblea del PRO porteño para dar luz verde al armado de un frente electoral. Sin demasiadas precisiones, a propósito.
Se pondrá en juego no solamente la alquimia que le permita al PRO un resultado digno en octubre en su principal bastión histórico. También su futuro como fuerza política. Si es que lo tiene.