
La fractura peronista o el deterioro de Macri. Esas dosvariables -que no se anulan entre sí- mandan en la mesa de arena de losgobernadores del PJ a la hora de definir el cronograma electoral del 2019.
El calendario de la elección presidencial es rígido. Porley, las listas para la elección 2019 se anotarán la medianoche del sábado 22de junio, las primarias serán el 11 de agosto y la general el 27 de octubre. Uneventual balotaje, se hará el 24 de noviembre.
La mayoría de las provincias tienen autonomía para fijar supropia fecha y, además, definir si votan en simultáneo a la presidencial o lohace con fecha propia.
Ese debate empezó a darse en las provincias, en particularlas gobernadas por el peronismo. Gustavo Bordet, en Entre Ríos, impulsa através de un grupo de diputados una reforma a la ley actual para”recuperar” la potestad de definir el cronograma.
En La Pampa, Carlos Verna, activó un debate político parapreparar el terreno para que en 2019, por primera vez en muchos años, lospampeanos elijan a su futuro gobernador en una fecha diferente a lapresidencial. Verna tiene facultad legal para convocar en fecha propia pero porla costumbre y para, además, involucrar al PJ, motorizó la discusión.
Aparecen dos factores nacionales que impactan en losterritorios.
Si el peronismo no avanza en un esquema de unidad quedefinan los candidatos en una gran PASO, para los jefes territoriales puede serun problema ya que con más de un candidato presidencial del PJ, lafragmentación se replicará en sus provincias si la elección es simultánea.
Es un elemento que, aunque todavía no está la definiciónúltima, tienen bajo análisis Bordet y Verna.
El pampeano, un crítico ferviente de Macri, tiene un vínculofluido con Massa y arrastra tensiones con Cristina de Kirchner. La presencia dela ex presidente en el ring electoral, puede precipitar la decisión de losgobernadores de despegar la elección aunque los plazos se acortan.
Pero en la balanza aparece otro asunto: si el deterioro deCambiemos se profundiza y la imagen de Macri sigue cayendo, puede resultarconveniente hacer coincidir la elección con la fecha nacional.
En Entre Ríos, por caso, el PJ observa que distintosepisodios puede dañar a Cambiemos, sobre todo la investigación por “lavadode fondos del narcotráfico” por el que se imputó el intendente de Paraná,Sergio Varisco de la UCR.
“Bordet cree que cuando antes vote será mejor porqueestará más fresco lo de Varisco y eso afectará a Cambiemos”, dicen desdeel peronismo de Entre Ríos. El gobernador, sin embargo, todavía no movió suscartas y manda a decir que lo que quiere es tener, como tuvieron susantecesores, la facultad de fijar la fecha electoral.
“Es probable que más tiempo pase, el gobierno de Macriesté peor, por lo que anticipar puede ser menos conveniente que hacerlo ensimultáneo”, advierte un dirigente entrerriano.
Está claro, sí, que Bordet irá por su reelección y queSergio Urribarri, el ex gobernador, está constitucionalmente impedido de volvera ser candidato para ese cargo.
Detrás de esos tironeos aparece Cristina de Kirchner. Unacrítica que suena en sectores K contra los gobernadores del PJ que planteandesdoblar la elección es que ese modo le sacan fuerza a la boleta nacional paraderrotar a Cambiemos.
El espacio que comanda Cristina empezó a darle cuerpo entodo el país a Unidad Ciudadana y tendrá como herramienta, de presión ynegociación, la posibilidad de presentar candidatos propios a nivel local, conlo cual pueden dividir el voto opositor a Macri.
Por lo pronto, en distritos de peso que controla el PJ comoCórdoba y Tucumán, todo se encamina a votaciones con fecha propia. JuanSchiaretti, que irá por su reelección, tiene una excusa técnica: como enCórdoba se vota con sistema electoral distinto -boleta única papel-, de factola elección va dividida.
En Chaco, donde manda Domingo Peppo, la elección tiene queir sí o sí, dividida.
“Nadie quiere que la pelea nacional se cuele en laprovincia. Y la forma de evitarlo es llamar a elecciones con fecha propia”,aseguró un dirigente del PJ pampeano. En esa provincia se da una curiosidad: laoposición radical siempre pidió desdoblar y ahora que Verna lo plantea,cuestiona esa posibilidad.