En la madrugada del martes se llevó a cabo la liberación de la investigadora Elizabeth Tsurkov, de nacionalidad ruso-israelí, quien había estado retenida en Irak desde marzo de 2023 por miembros del grupo Kataib Hezbolá.
El presidente Donald Trump confirmó que la académica de la Universidad de Princeton ya se encuentra bajo protección diplomática en la sede de Estados Unidos en Bagdad. Según informó la agencia Europa Press, la noticia se dio a conocer tras complejas operaciones de inteligencia llevadas a cabo por agencias estadounidenses y unidades iraquíes.
“Fue liberada por Kataib Hezbollah y se encuentra a salvo en la embajada, después de haber sido sometida a tortura durante muchos meses”, detalló Trump en la red Truth Social.
El presidente estadounidense instó a otras facciones armadas a seguir el ejemplo de la milicia iraquí y solicitó a Hamas la entrega inmediata de todos los retenidos en la Franja de Gaza, según reportó The Times of Israel.
El primer ministro iraquí, Mohamed Shia al Sudani, confirmó la entrega de Tsurkov y especificó que la liberación fue “la culminación de esfuerzos muy prolongados”, impulsados por los cuerpos de seguridad nacional.
En el momento de su secuestro, Tsurkov había viajado a Irak utilizando un pasaporte ruso para realizar tareas de campo relacionadas con su doctorado. The Guardian informó que su trabajo se centraba en el análisis de la Primavera Árabe y los conflictos en Medio Oriente, actividades académicas llevadas a cabo en un contexto donde la entrada de ciudadanos israelíes está prohibida en ese país.
En noviembre de 2023, una cadena de televisión local con vínculos a milicias chiíes difundió imágenes inéditas que confirmaban que Tsurkov seguía con vida.
A partir de ese momento, organizaciones y familiares iniciaron acciones que finalmente condujeron a su liberación. Emma Tsurkov, hermana de la investigadora, manifestó que la familia “está increíblemente feliz” y expresó su agradecimiento tanto al presidente Trump como al emisario Adam Boehler por el seguimiento constante del caso. La ONG Global Reach también fue reconocida por su labor.
El caso de Tsurkov motivó un inusual trabajo conjunto entre las autoridades estadounidenses e israelíes. Según informó The New York Times, el primer ministro Benjamin Netanyahu contactó a la familia tras la noticia, enfatizando que la devolución fue resultado de la coordinación entre organismos de inteligencia, el coordinador nacional de rehenes y diplomáticos de alto nivel.
El prolongado cautiverio de Tsurkov generó numerosas reacciones en Israel, Estados Unidos y Naciones Unidas. Reconocida por su dominio del idioma árabe, su colaboración en entidades dedicadas a la defensa de derechos palestinos y su aporte académico sobre movimientos sociales, la investigadora se destacó por su perfil versátil.
Antes de su cautiverio, Tsurkov completó estudios universitarios en Jerusalén, Tel Aviv y Chicago, y se especializó en temas relacionados con la insurrección en Siria y la evolución política en el mundo árabe.
La salida definitiva de Tsurkov de Irak marcó el cierre de una campaña internacional prolongada y el reinicio de la familia, que después de 903 días de incertidumbre pudo reunirse con la joven y expresar su deseo de retomar la normalidad tras casi tres años de espera.
