Desde la asunción de la actual administración, los concejales Aldo Bachetti y Jorge Maier han sido la referencia para la comunidad de Paraná a la hora conocer las irregularidades de esta gestión y el desmanejo de los fondos públicos, que hoy se refleja en el gravísimo déficit de las cuentas municipales que culminó con la indiscriminada y excesiva suba de tasas municipales decidida por Solanas, contrariando su promesa electoral de no aumentarlas si triunfaba.
Como represalia por el permanente rol asumido por estos ediles -cuestionamiento a la derogación de distintas normas que consagraban mecanismos de participación ciudadana como el Incinipa y la Mesa de Transporte Público, la no implementación del Presupuesto Participativo, la denuncia de irregularidades en la concesión gratuita por 15 años de “Parador Uno”, el cuestionamiento de los numerosos nombramientos de familiares, que han convertido al HCD en un virtual “bien de familia”, y fundamentalmente la denuncia del grave déficit de las cuentas municipales- finalmente dispararon la persecución política.
Ante la imposibilidad de hacerlos “cambiar de actitud”, Solanas y el bloque oficialista decidieron, en una grosera medida de presión, no renovar unilateralmente y sin aviso la relación laboral de los colaboradores del bloque de la Concertación Entrarriana, el bloque más austero y con menos empleados del HCD.
Torpemente, toman esta medida de presión discriminatoria, antidemocrática y profundamente autoritaria, propia de prácticas que creíamos superadas – un “apriete”-, al mismo tiempo que continúan vigentes los numerosos contratos de los colaboradores del bloque del PJ y también del bloque de la UCR, cuyo silencio frente a esta situación llama poderosamente la atención.
En el 2003 el HCD gastó $4.980.000. Durante 2006 tendrá un gasto de $8.125.000, un 70% más que no se refleja proporcionalmente en un incremento salarial, sino en un aumento de la planta de personal, entre los que abundan familiares y allegados al oficialismo, y tampoco se tradujo en una mayor y mejor producción normativa del cuerpo deliberativo.
El informe solicitado por Bachetti y Maier exigiendo la nómina completa del personal de planta permanente, la lista completa de los contratos de obra y de servicios, los decretos con los nuevos nombramientos y el monto que todo esto implica para el HCD, no fue respondido a pesar del deber de información y transparencia que la sociedad actual exige de sus representantes en todo lo relativo al dinero de los contribuyentes.
TODOS los funcionarios públicos, sin excepción, son simples mandatarios de la comunidad que los inviste, a la que deben servir y rendir cuentas.