La Unión Cívica Radical (UCR) y el PRO negocian contrarreloj este martes un acuerdo para conformar un espacio que los coloque como la tercera fuerza de la Cámara de Diputados, postergando a los bloques de Provincias Unidas y de Innovación Federal, que apadrinan distintos gobernadores.
Cristian Ritondo encabeza las conversaciones del lado amarillo, mientras que Karina Banfi y Pamela Verasay estaban del lado radical.
El macrismo iba a aportar 14 diputados, pero a último momento se bajaron el rionegrino Sergio Capozzi y el santafesino José Núñez, quienes pasaron al elenco de Provincias Unidas de los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Ignacio “Nacho” Torres (Chubut), Gustavo Valdés (Corrientes), Carlos Sadir (Jujuy) y Claudio Vidal (Santa Cruz).
Ritondo esperaba la confirmación del gobernador Rogelio Frigerio (Entre Ríos) para sumarlo a la movida, lo que le permitiría aportar 13 legisladores al interbloque.
En tanto, la UCR sumaría 7 legisladores: Banfi, Verasay, Lisandro Nieri, Gerardo Cipolini, Emilia Schneider, Guillermo Agüero y Diógenes González, quien fue sumado por intervención del gobernador Gustavo Valdés.
Fracasaron las gestiones para sumar a los jujeños María Inés Zigarán y Jorge Rizzotti, quienes responden al gobernador Sadir, y pasaron al bloque de Provincias Unidas.
Como parte de las conversaciones también hubo llamados a Oscar Zago, quien forma el bloque del MID con Eduardo Falcone. Sin embargo, el exjefe del bloque de LLA también mantenía abierta una conversación con Innovación Federal, el espacio que armaron Gustavo Sáenz (Salta), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Rolando Figueroa (Neuquén), Hugo Passalacqua (Misiones) y Raúl Jalil (Catamarca).
Si se cierran los acuerdos, el interbloque de la UCR, PRO y MID totalizaría 22 bancas, superando a Provincias Unidas, que hasta esta tarde confirmaba un total de 17 diputados y al conglomerado de los gobernadores del norte que especulaban llegue a 18 legisladores.
El Gobierno sigue con particular atención estos armados, no solo para ver si puede pescar algún diputado suelto que lo ayuda a torcer el empate actual y quedarse con la primera minoría de la Cámara; también observa a estos grupos, porque con ellos deberá negociar el Presupuesto y las reformas laboral e impositiva que impulsa.
