
En medio de una importante pérdida de representación parlamentaria, el radicalismo buscará renovar sus autoridades partidarias el próximo 12 de diciembre. La gestión de dos años de Martín Lousteau llega a su final y el nombre que más suena por estas horas para reemplazarlo es el del gobernador correntino Gustavo Valdés, que termina mandato en su provincia a fin de año dejando la gobernación en manos de su hermano Juan Pablo.
El partido centenario está obligado a restablecer una nueva estrategia dentro del Congreso para buscar nuevas alianzas y mantener influencia en el recinto. La elección de Valdés sería un punto medio que unificaría los votos violáceos, los del sector del gobernador mendocino Alfredo Cornejo, pero también los anti Javier Milei.
El operativo clamor comenzó este fin de semana en las redes. Por ejemplo, el senador fueguino Pablo Blanco posteó en X: “Estoy convencido de que Valdés debe presidir la UCR nacional. Su capacidad de trabajo, su visión federal, su vocación integradora y su liderazgo son elementos centrales que el partido necesita”.
También se sumó, el mendocino Julio Cobos, que deja su banca de diputado el 10 de diciembre. “Gustavo ha defendido los valores del radicalismo y ha demostrado capacidad de gestión y conducción. Gustavo Valdés es la persona indicada para presidir la UCR Nacional y fortalecer el partido en toda la Argentina” expresó.
Según pudo saber Tiempo, el correntino aún no termina de confirmar que tiene intenciones de asumir ese espacio. “Le gusta hacerse rogar”, indicó a una fuente del partido. En la lista de nombres que circulan también aparece el de la diputada cornejista Pamela Verasay, el del gobernador santafecino Maximiliano Pullaro, el del exintendente de la ciudad de Córdoba, Ramón Mestre, y la vicepresidenta del Comité Nacional de la UCR, Inés Brizuela y Doria.
En el primero de los casos, sostienen que la legisladora mendocina “no tiene chances” por haber renovado su banca desde la lista de La Libertad Avanza. En cuanto a Pullaro, no tendría intenciones de mezclar la gestión del partido con la de la provincia que gobierna. Brizuela Doria, por su parte, exintendenta de La Rioja, no tendría consenso de las agrupaciones feministas dentro del partido.
Como sea, las definiciones tendrán incidencia en los bloques de ambas cámaras del Congreso Nacional. En el Senado, la presidencia volvería a quedar en manos del correntino Eduardo Vischi. Sin embargo, la preocupación gira en torno a la situación crítica del bloque en la Cámara de Diputados.
Durante el último año, la Unión Cívica Radical (UCR) funcionó en la Cámara Baja dividida en tres bloques, pero con un número considerable. Los resultados del pasado 26 de octubre dejaron a los dirigentes boinas blancas casi al borde de la extinción, con una significativa disminución de bancas para recambio legislativo del 10 de diciembre.
El bloque UCR, que lidera Rodrigo de Loredo pasará de catorce a solo tres diputados, mientras que Democracia para Siempre, conducido por Pablo Juliano, que contaba con nueve miembros, bajará a tres. En tanto, los radicales con peluca que integraban la Liga del Interior y tienen mandato por dos años más dieron el salto al bloque de la Libertad Avanza la semana pasada.
Por lo que se especula que de la treintena de diputados que conformaba el bloque radical en el 2021, ahora sólo queden cerca de diez representantes entre los radicales del espacio que deja De Loredo y los de Democracia para Siempre. “La idea es que trabajen unificadamente sino será paupérrimo”, sostuvo un integrante del partido”
Y es que en el conteo figuran Verasay y Lisandro Nieri (Mendoza), Karina Banfi (Buenos Aires), Gerardo Cipollini (Chaco), Jorge Rizzotti (Jujuy) y la posibilidad de que se integre el entrerriano Darío Schneider que entró por la boleta de LLA.
No está confirmado que el interbloque Encuentro Federal pase a llamarse Provincias Unidas. “Todo dependerá de qué decida Miguel Ángel Pichetto”, sostienen fuentes parlamentarias. De todas maneras, se especula que Martín Lousteau y María Coletta (Ciudad de Buenos Aires) se sumen a ese espacio junto a Gisela Scaglia (Santa Fe). La santafesina aún no definió si dejará su cargo de vicegobernadora para asumir en el Congreso. De ser así su lugar sería ocupado por Melina Giorgi.
La reconfiguración del radicalismo en el Senado también achicará al espacio pero con menor impacto. Actualmente el bloque cuenta con 13 representantes y según el poroteo que la UCR maneja quedaría un bloque con un total de diez bancas. «





