La Secretaría Nº 1 en lo Criminal y Correccional del Juzgado federal de Paraná tiene en sus manos una causa en la que se intenta determinar la responsabilidad de los involucrados en la venta de automóviles que tenían la documentación adulterada. Entre una serie de medidas que se tomaron, hay varias personas imputadas con distintos grados de responsabilidad y se trabaron embargos económicos.Si bien los delitos que se investigan están encuadrados en numerosos artículos del Código Penal, el común denominador que los une es el de Defraudación y Estafa.La causa, que comprende 16 hechos y se caratuló De Diego Luis y otros sobre infracción a los artículos 292 y 296 del Código Penal tiene una importante cantidad de personas involucradas, entre los que se encuentra una escribana paranaense. Precisamente el miércoles, Luis Di Lisia, el fiscal que tiene a su cargo la causa, ordenó que se realicen pericias caligráficas sobre documentación que obra en el expediente para determinar qué responsabilidad tuvo la escribana en los hechos. Además, entre las medidas que se adoptaron se decretó la prisión preventiva sobre De Diego, que fue apelada por su defensa.Fuentes judiciales destacaron el trabajo del juez ad hoc Ramón Ferreira por la “la movilidad de la causa”, y especialmente “por la cantidad de actuaciones que se están realizando para determinar las responsabilidades de los involucrados”. El dato no es menor si se tiene en cuenta la cantidad de personas investigadas -imputadas por varios delitos, de los que por algunos ya les fue dictada la falta de mérito- y por la cantidad de artículos del Código Penal que habrían sido vulnerados en los hechos.La causaLa causa comenzó a tomar forma cuando se advirtió que los nombres de los involucrados en distintos hechos de la misma índole se repetían. Así, la Justicia federal halló elementos que consideró eran de su jurisdicción y solicitó las actuaciones que se estaban realizando en distintos juzgados de Instrucción de la provincia.Además de De Diego -por quien su abogado defensor, Iván Vernengo, apeló su procesamiento- y de la escribana están imputados al menos otras seis personas.Los vehículos fueron secuestrados en distintos operativos de tránsito que se realizaron en los últimos años en Paraná por efectivos de la división Robos y Hurtos y en una concesionaria de automotores usados ubicada en avenida Almafuerte en la capital entrerriana.Precisamente en uno de los tantos procedimientos, el 15 de noviembre de 2005 la propietaria de un Fiat 147 sufrió el secuestro del rodado puesto que los efectivos comprobaron que aquel tenía los números de motor y de chasis adulterados.Con el patrocinio del abogado Jorge Sueldo, la mujer inició una denuncia contra De Diego porque supuestamente le vendió el vehículo con la documentación irregular. Así, la mujer hace dos años que no tiene acceso al vehículo, y sólo pudo recuperar un equipo de gas en virtud de que presentó la documentación pertinente que avaló que era de su propiedad.Una causa por cada vehículoSegún el voluminoso expediente, los vehículos que se secuestraron, de acuerdo al orden en el que están en la causa, fueron una camioneta Ford F100, un Fiat Regatta -cuyo dueño vive en María Grande-, otra camioneta Ford F100, un Fiat 128 Súper Europa, un VW Gol, un utilitario Renault Express, una Fiat Spacio -la dueña vive en Buenos Aires y al rodado le había sustraído las patentes-, otro VW Gol, un Fiat Duna, un Peugeot 306, otra camioneta Ford F100, un Ford Fiesta, otro utilitario Renault Express, dos Fiat Uno, y finalmente un Fiat 147.
