El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, no sólo no desmintió la existencia de contactos entre el Gobierno nacional y el Máximo Tribunal acerca de un eventual tratamiento de la legitimidad y constitucionalidad de las retenciones móviles, sino que rubricó una nota en la que aclara que el cuerpo colegiado no se pronunciará sobre los derechos de exportación o cualquier otra cuestión de tono político sino a través de sus fallos.La Corte Suprema, el único poder del Estado que se había mantenido explícitamente afuera del campo barroso en el que se desarrolla la disputa entre el sector agropecuario y el Gobierno, quedó ayer en medio de versiones cruzadas por una supuesta reunión -desmentida por Néstor Kirchner- entre la presidenta Cristina Fernández y la autoridad máxima de la Corte, Ricardo Lorenzetti.A través de un comunicado difundido en la sala de prensa del Palacio de Tribunales, la Corte señaló que "la función institucional es ocuparse de las cuestiones de Estado y no de los debates políticos y en caso de controversias sólo opina a través de sus sentencias".Según consignó el diario La Nación en su edición del miércoles, se produjo un encuentro reservado entre Cristina Kirchner y el juez del máximo tribunal, durante el fin de semana largo del Día del Padre, aquel en que la Gendarmería desalojó la ruta 14 y se llevó a Alfredo De Angeli detenido en medio de cacerolazos. En esa supuesta reunión se habría hablado acerca de la opinión de la Corte respecto de la aplicación de las retenciones móviles.Mientras que desde el cuarto piso de Tribunales hubo una orden estricta de no hablar del tema, Néstor Kirchner aprovechó un acto en el Mercado Central para negar todo: “Lo desmiento absolutamente, no hay ninguna reunión secreta con nadie. Cristina no hace reuniones secretas con ningún poder”, dijo, y luego provocó al presidente de la Corte pidiéndole que hiciera declaraciones: “Calculo que el doctor Lorenzetti va a desmentir esto”.
