
Mientras el presidente Javier Milei se prepara para firmar su tercer veto en pocas horas, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, reaparecerá esta tarde en Tucumán. Su presencia marcará el lanzamiento de campaña de sus candidatos de cara a las elecciones del 26 de octubre, así como un fuerte respaldo al cuestionado Martín Menem. El presidente de la Cámara de Diputados acompañará a Karina en medio de las críticas que ha recibido tras el reciente revés en Buenos Aires.
Milei ya ha firmado el veto a la Ley de Financiamiento Universitario y a la Ley de Emergencia Sanitaria de la Salud Pediátrica, que dependía de un respaldo financiero para afrontar la delicada situación del Hospital Garrahan. En las próximas horas, también vetará la ley de redistribución automática de Aportes del Tesoro Nacional (ATN), una iniciativa promovida por los 24 gobernadores.
Con la firma de Javier Milei, el Gobierno reafirma su decisión de utilizar el poder de veto como una herramienta fundamental para frenar iniciativas que considera incompatibles con su plan de ajuste.
Un integrante de la mesa política del Presidente fue contundente al referirse a los vetos presidenciales: “No negociamos con una pistola sobre la mesa”, sentenció el funcionario, que ha ganado empoderamiento en las últimas horas bajo la autoridad del Presidente. Otro colaborador, al salir de una de las numerosas reuniones que han tenido lugar en la Casa Rosada esta semana, afirmó que “primero se veta y después se negocia”. El rumbo trazado por el Presidente parece claro en este sentido.
Este gesto no es neutro. Representa, en la práctica, un endurecimiento de la relación con el Parlamento y con las provincias, que esperaban un alivio financiero para enfrentar la reducción en la recaudación. El veto a los ATN, en particular, deja al nuevo ministro del Interior, Lisandro Catalán, con una tarea particularmente difícil: construir puentes con gobernadores que interpretarán la noticia como una declaración de guerra. Desde su despacho, el nuevo funcionario deberá equilibrar la postura rígida del Presidente y la necesidad de mantener un canal de diálogo con los mandatarios provinciales.
La Jefa de Campaña
Simultáneamente, Karina Milei ha elegido Tucumán para presentar una imagen de campaña. La secretaria general de la Presidencia, arquitecta del armado libertario y “madre” de la derrota en Buenos Aires, encabezará un acto con líderes locales con un claro enfoque proselitista. Su llegada al norte, una región históricamente dominada por el peronismo, ha sido interpretada como un gesto de construcción federal y una confirmación de que la hermana del Presidente no se apartará de su papel protagónico en el ámbito nacional.
La semana culmina con la vista puesta en el exterior. Tras cancelar su viaje a España, Javier Milei reanudará su agenda internacional con un destino cercano: Paraguay. El martes se reunirá en Asunción con Santiago Peña, su gran aliado político en la región, y participará en la nueva edición de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC).