
El mes de mayo tiene una particularidad para los argentinos.En ese mes del año 1853, ocurrieron dos hechos históricos para nuestra Nación.Se sancionó la Constitución Nacional y también se promulgo la misma. Es estemes tan especial, quisiera rendir homenaje a uno de los padres de esaConstitución, Justo José de Urquiza.
El padre de Justo José de Urquiza era hijo de un inmigrantevasco, afincado en Entre Ríos, y comandante militar de casi medio territorio,cuando acaecieron los sucesos de mayo de 1810.
Su hijo, nació en una gran estancia al norte de Concepcióndel Uruguay, Entre Ríos. Comenzó su vida pública en 1826, como diputado en la LegislaturaProvincial. La llegó a presidir años después, iniciando así una trayectoriapolítica de casi 50 años, ya que murió en 1870, siendo Gobernador de suprovincia después de haber sido Presidente de la Confederación Argentina.
Supo preparar un gran ejército, disciplinado y poderoso.
Es muy valioso lo que realizó en Entre Ríos en ese lapso dediez años, desde 1842 a 1852, siendo Gobernador.
Creó escuelas, prácticamente en todos los pueblos einclusive en la campaña.
Fundó el Colegio Nacional de Concepción del Uruguay de grantrascendencia y de enorme influencia en el ámbito nacional e internacional.Hubo, desde el comienzo del funcionamiento de ese histórico Colegio Nacional unanhelo. Que a sus aulas acudieran jóvenes de todos puntos del país. Lo que estabaligado con el gran propósito de organización. Es decir que Urquiza preparó aesos jóvenes para grandes realizaciones, ilustrando a la juventud para queinterpretasen en su momento, la nueva situación.
Ese momento llegó en 1851 cuando se pronunció contra Rosas,desde el Palacio de San José. Salió, en la madrugada del primero de mayo de1851 -tenía casi 50 años- al frente de sus hombres, para proclamar su propósitode constituir legalmente el país, hecho que plasmó en la ciudad de Concepcióndel Uruguay.
En ese “Pronunciamiento” que así se llamó, propuso, siendofederal, lo que realza su proclama que se reemplazase la despectiva frase “Mueran los salvajes unitarios”, por “Mueran los enemigosde la Organización Nacional”, mucho más humana la expresión.
Es que Urquiza sentía que transar en un principio eratransar en todos los principios.
El 3 de febrero de 1852, la Batalla de Caseros, tuvo lavaliosa consecuencia de terminar las cruentas rencillas entre argentinos yunirlos ya al calor de una Constitución.
El triunfo en esa batalla le permitió realizar el programaprevisto.
El 1 de mayo de ese año 1853, salió a la luz, laConstitución Nacional que hoy nos rige, con algunas modificaciones posteriores.
La gran obra estaba cumplida.
A cuarenta y tres años de la Revolución de Mayo, yacomenzaba la práctica de las instituciones.
¡Un enorme avance!
Surgió entonces la primera presidencia constitucional delpaís.
A Rivadavia se le había otorgado 27 años antes el título dePresidente, pero de las Provincias Unidas del Río de la Plata, no de laRepública.
Urquiza fue Presidente de la Confederación.
Sabido es, que Buenos Aires se separó del resto de lasprovincias argentinas, por lo que el país debió iniciar este nuevo período sincontar con el valioso concurso de su territorio más rico. Entonces, seestableció la capital en Paraná.
Cabe destacar la libertad de acción del Poder Legislativo,que trabajó entonces con total independencia y sin presiones. Es que quienvenía luchando desde hacía más de 20 años por imponer la ley, quiso ser elprimero en respetarla; después sería el primero, también, en apuntalarla.
Durante su presidencia, se destacó su tarea por eltransporte y por la inmigración. También por la exploración de ríos. Surgieronlas primeras colonias agrícolas con inmigrantes. Urquiza, cumplió todo sumandato presidencial y dejó el país unificado. Y sobre todo el aporte dehombres de ciencias extranjeros que se incorporaron al suelo argentino.
Este patriota cumplió su mandato y dejó el país unificado.
Finalmente, cayó asesinado un 11 de abril de 1870 -tenía 68años-. Fue un crimen político.
Cincuenta hombres invadieron el Palacio de la gobernación deEntre Ríos, por su parte posterior. Los grandes portones estaban abiertos ynadie atinó a resistir.
El único que lo intentó fue el propio Urquiza, que tomó unarma e hirió a algunos de sus atacantes, pero un balazo certero dio en sumejilla. Luego, cinco puñaladas rubricaron el ensañamiento.
La causa del asesinato habría sido su política de unidadnacional. La que siempre siguió y que algunos no captaron en ese momento.También los intereses y negocios políticos que perjudicó con su limpiapolítica.
Urquiza había nacido en octubre de 1801 en Talar del Arroyo,cerca de Concepción del Uruguay.
Dos meses antes de ser asesinado, Sarmiento, ya Presidentede la Nación, lo visitó en el Palacio de Gobierno.
Un abrazo interminable rubricó -por encima de lasdiferencias- la identidad de ideales.
Y un aforismo final para este luchador, con referencia al reencuentroespiritual con Sarmiento, que considero en justicia le corresponde
“Los idealistas nunca se sienten enemigos, solo seconsideran, adversarios”