
Ambos proyectos serán debatidos el miércoles 13 de agosto en comisiones. Buscarán convertirlos en ley el 20 de agosto.
Además de las discusiones de financiamiento de las universidades y la salud pediátrica, el temario de la Cámara de Diputados de este miércoles incluía el emplazamiento de dos leyes impulsadas por los gobernadores provinciales y que ya contaban con media sanción del Senado: la distribución de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y la creación de un fondo a partir de la recaudación del impuesto a los combustibles. La agenda incomodaba a Casa Rosada, que improvisó una salida.
Apenas inició el momento de debate del proyecto para distribuir los ATN -que contó con 56 votos a favor y 1 en contra en el Senado, con ausencias de todos los oficialistas-, tomó la palabra el cordobés Gabriel Bornoroni. El presidente del bloque de La Libertad Avanza solicitó trastocar el temario de la jornada y acordar el tratamiento de ambos proyectos en comisiones con día y fecha, sin necesidad de que se aprueben los emplazamientos. Es decir: evitar las votaciones y dar marcha atrás con una estrategia sostenida todo este año, en la que la Comisión de Presupuesto y Hacienda no convocó a ningún proyecto que no sea de su autoría, obligando a la oposición a introducir solicitudes de emplazamientos en sesiones especiales.
La reacción de los bloques que convocaron a la sesión -que tenían clara mayoría, expuesta en la votación previa de 158-75 por financiamiento universitario– osciló entre el desconcierto y la desconfianza. Los diputados abogados se pelearon por la palabra: pidieron que se expida una resolución sobre la convocatoria a comisiones, que se incluya que el proyecto quedaría “listo para dictaminar” o no avanzar con la solicitud libertaria que era coincidente con su posición. Solicitaron todo tipo de certezas para evitar cualquier treta. “El que se quema con leche, ve una vaca y llora”, sintetizó el formoseño Fernando Carbajal (Democracia para Siempre).
El bonaerense Cristian Ritondo (PRO) intervino en el intercambio -que se extendió unos treinta minutos- y argumentó: “Es el pedido de los gobernadores. Nosotros tenemos tres”. Citó el visto bueno de Miguel Pichetto y le habló directamente a Germán Martínez: el tiempo parlamentario parece otorgar valor a la palabra. Finalmente, se pacificó la discusión y se votó a mano alzada, de forma homogénea. “El que propuso evitar que se vote no presentó el proyecto ni tampoco lo va a acompañar. Claramente fue una maniobra… no sé bien para qué”, le dijo a Ámbito un diputado provincialista.
Así, el proyecto para garantizar un reparto automático a las provincias del 1% los ATN se tratará en la Comisión de Presupuesto el miércoles 13 de agosto a las 12 horas. Cuatro horas después, un plenario entre esa comisión y la de Energía abordará la propuesta que elimina tres fideicomisos (de Infraestructura Hídrica; Infraestructura de Transporte; y Sistema Vial Integrado, estos últimos dos con mucha pertinencia) y tres fondos (Compensador del Transporte; Especial de Desarrollo Eléctrico del Interior; Nacional de la Vivienda) y fija para las provincias una mayor participación en la distribución del impuesto a los combustibles. La oposición buscará dictaminar ambas iniciativas para tratarlas en sesión el 20 de agosto.
El rol de los gobernadores en Diputados
En la sesión del 6 de agosto, la postura de los mandatarios también repercutió en el apoyo de sus brazos legislativos en las votaciones por universidades. El cambio de postura del tucumano Jaldo se notó en el bloque Independencia, cuyos tres miembros votaron a favor luego de más de un año y medio alineado con Casa Rosada. Nancy Picón Martínez (Producción y Trabajo), referenciada con el sanjuanino Orrego, también lo acompañó; misma postura que los alineados con el salteño Sáenz (Calletti, Outes, Vega).
Algunos de los representantes de los mandatarios de “Provincias Unidas” tuvieron posición ambivalente, tanto para los legisladores de Santa Cruz (uno a favor y otro en contra), Chubut (uno a favor y una abstención). En cambio, los cinco cercanos a Llaryora, los tres vinculados a Sadir y la diputada que responde a Pullaro respaldaron la ley.
En cuanto a los aliados, los mendocinos se correspondieron con la alianza anunciada en su distrito y los dos allegados al mandatario Cornejo (Nieri y Verasay) se ausentaron. Morchio, cercano al entrerriano Frigerio, se abstuvo.