
El presidente de la Cámara de Diputados de Entre Ríos, AngelGiano, lanzó oficialmente su campaña para intendente de Concordia, de cara alas próximas elecciones.
Si bien desde hace tiempo se venía hablando de supostulación, la máxima autoridad de la Cámara Baja provincial sostuvo en sumomento que estaba dedicado a su función en diputados.
Sin embargo, ahora decidió finalmente formalizar sus intenciones,tal como lo anunció mediante un video publicado en sus redes sociales,presentado bajo el lema “Tengo equipo y voy a jugar”, el cual seexplica mediante un comunicado que arribó a la redacción de INFORME DIGITAL.
El texto expresa
Angel Giano, lanzó oficialmente su campaña para las próximaselecciones municipales con un video publicado en sus redes sociales. Unapropuesta creativa, que confirma su candidatura y mueve el avispero de lapolítica local.
Se trata de una propuesta inesperada, en la que se puede veral candidato ingresando a una cancha en donde interactúan de forma desordenadapersonas jugando al básquet.
Giano observa la falta de orden y organización en la canchay decide entrar. En rol de conductor y conocedor de cómo resolver la situación,va intercambiando y explicando distintas posiciones y tiros permitiendo lacirculación del balón y los dobles de las jugadoras y jugadores del equipo.
Una vez que tiene la pelota en sus manos, Giano, no duda enposicionarse y ante la pregunta de una voz en off él responde “Si, este es milanzamiento. Tengo equipo y voy a jugar”, en una clara a alusión a su intenciónde competir por la intendencia de Concordia.
Acto seguido y luego de que Giano convierte el tiro, elequipo se abraza y celebra al grito de “Vamos Concordia”.
Se sabe que Giano es deportista de toda la vida y que elbásquet es una de sus pasiones, de modo que la analogía con la política no escasual.
Si bien se esperaba el lanzamiento en los próximos días, lajugada no deja de sorprender por lo disruptiva. Un primer tiro valiente, en uncontexto donde los símbolos hablan por sí solos. Un primer tiro valiente, en uncontexto donde los símbolos hablan por sí solo.




