El diputado del PRO Gerardo Milman ha sido citado a declarar por la Justicia de Irán en el contexto de una demanda civil interpuesta en su contra por el secuestro del avión venezolano-iraní en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza en 2022.
La notificación recibida este martes por el diputado de Bullrich establece que deberá comparecer a las 9 del 27 de octubre de este año ante los tribunales civiles de Teherán. Según el telegrama enviado, la demanda es promovida por Saeed Valizadeh, Mohammad Khosravi Aragh, Gholamreza Ghasemi y Mahi Mosul, quienes reclaman una indemnización por “daños directos e indirectos”.
“Hoy recibí una citación de los tribunales de Teherán para declarar por mi denuncia del avión iraní-venezolano en Argentina”, anunció Milman a través de sus redes sociales. El legislador fue uno de los que presentó la denuncia que llevó al magistrado Federico Villena del juzgado de Lomas de Zamora a ordenar la incautación de la aeronave.
Frente a esta convocatoria, Milman se mostró reticente. “La Justicia de la República Islámica de Irán pretende que comparezca personalmente, en un país donde no existe el Estado de Derecho”, añadió y luego advirtió: “No me van a intimidar. Mi compromiso con la verdad es inquebrantable. Continuaré denunciando cada amenaza, venga de donde venga”, afirmó.
El secuestro del avión venezolano-iraní
El avión Boeing 747, perteneciente a la aerolínea venezolana Emtrasur Cargo, fue secuestrado en junio de 2022 a raíz de la orden judicial del magistrado de Lomas de Zamora, que investigaba una supuesta trama vinculada al terrorismo.
La causa se originó a partir de la denuncia interpuesta por Milman, Ricardo López Murphy y Franco Rinaldi, con la asesoría de María Eugenia Talerico y Yamil Darío Santoro. Al mismo tiempo, Estados Unidos también estuvo involucrado, solicitando el embargo de la aeronave y, finalmente, logrando que en febrero de 2024 fuera trasladada a su territorio.
Entre otras razones, EE.UU. argumentaba que existía una conexión entre el Boeing 747 adquirido por la firma venezolana y la empresa iraní Maham Air. Esta última se encuentra sujeta a sanciones norteamericanas por su presunto vínculo con la Fuerza Quds, el brazo de élite del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica.
En el contexto del secuestro del avión, siete tripulantes fueron detenidos en el país, entre ellos Gholamreza Ghasemi, quien era el piloto, Mohammad Khosravi Aragh y Mahi Mosu. Sin embargo, cuatro meses después fueron liberados y autorizados a salir del país, sobreseídos por falta de mérito por el juez Villena. Ahora, reclaman desde Irán una indemnización.
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