
El entusiasmo que anoche inundó al Gobierno por los resultados electorales del domingo fue palpable, especialmente tras el mensaje de Javier Milei: “Viva La Libertad, Carajo”, acompañado de una imagen de Emilia Orozco, figura emblemática del sorpresivo desempeño de La Libertad Avanza en la capital de Salta. Este fenómeno no se limitó a Salta; los libertarios también obtuvieron victorias en San Salvador de Jujuy y, en colaboración con el gobernador Leandro Zdero, en Chaco.
En esta jornada, la Casa Rosada no se encontraba en riesgo, pero cosechó logros tanto propios como de aliados, ya que cuatro provincias vieron reelecciones de gobernadores afines al oficialismo. Zdero, el salteño Gustavo Sáenz, el jujeño Carlos Sadir (UCR) y Claudio Poggi renovaron sus mandatos en las urnas.
Por el contrario, el peronismo, particularmente en su facción kirchnerista, enfrentó una jornada devastadora: sufrió derrotas en Chaco con su candidato más fuerte y en San Luis, donde los postulantes del cristinista Alberto Rodríguez Saá fueron superados por el oficialismo. En Salta y Jujuy, el peronismo se ubicó en el tercer y cuarto lugar, justo detrás de la izquierda.
En ninguna de las cuatro provincias los candidatos de izquierda lograron sorpresas, confirmando su estatus de minorías. En Jujuy, por ejemplo, donde Alejandro Vilca había alcanzado más del 25% de los votos en ocasiones anteriores, esta vez se quedó por debajo del umbral de dos cifras. La situación fue similar para el PRO de Mauricio Macri, que no consiguió relevancia en la contienda.
Un dato destacable del significativo domingo electoral fue el triunfo en Salta, donde el gobernador Sáenz se impuso a nivel provincial, aunque perdió en el único bastión donde la militancia libertaria, dirigida por el influyente asesor Santiago Caputo, hizo campaña. Daniel “El Gordo Dan” Parisini, el diputado Agustín Romo, Iñaki Gutiérrez y Mariano Pérez respaldaron a Orozco, una candidata con posibilidades reales de triunfo.
En Chaco, el segundo éxito libertario llegó de la mano del gobernador radical Zdero. Esta estrategia, centrada en formar una coalición ganadora, fue ejecutada por Karina Milei y Eduardo “Lule” Menem. La “marca” de La Libertad Avanza se asoció a Chaco Puede Más, logrando derrotar al exgobernador Jorge Milton Capitanich, quien sufrió su segunda derrota consecutiva con su agrupación Chaco Merece Más.
En San Salvador de Jujuy, La Libertad Avanza se mostró satisfecha con el buen desempeño de las diversas listas presentadas por el oficialismo, Jujuy Crece, liderado por Carlos Sadir, un radical que ha comenzado a actuar con autonomía. “Tuvimos un excelente resultado y logramos varios concejales. Es el camino: presentar candidatos donde hay oportunidades de ganar y ajustar acuerdos donde hay coincidencias en las ideas y el rumbo del país”, explicaron desde la Casa Rosada.
Con el triunfo en Salta, la notable performance en la capital jujeña y el éxito de Juan Pedro Aleart en Rosario, La Libertad Avanza confirma su consolidación en los centros urbanos del interior.
“Estos resultados ponen de manifiesto la necesidad de una estrategia adaptada a cada distrito”, señalaron otras fuentes oficialistas. Dentro de La Libertad Avanza, coexisten diferentes enfoques en lo que proponen -con el apoyo de Karina Milei- Martín y Lule Menem, en contraste con la estrategia sugerida por Caputo.
Para analizar los resultados, Infobae convocó a los analistas políticos Federico Aurelio (Aresco), Facundo Nejamkis (Opina Argentina) y Gustavo Córdoba (Zuban Córdoba).
Federico Aurelio destacó que los principales ganadores fueron “los oficialismos provinciales que, al desdoblar las elecciones, facilitaron que la gente diferenciara sus pensamientos a nivel nacional y provincial”.
“Esto confirma…”
Los resultados del domingo han generado un clima positivo en la gestión local, independientemente de su origen o composición, afirmó un experto. “El único espacio político a nivel nacional que logró destacar en las elecciones fue La Libertad Avanza, ya que contribuyó al triunfo en Chaco, ocupó el segundo lugar en Jujuy y tuvo un desempeño notable en Salta, además de posicionarse segundo a nivel provincial”, señaló el director de la consultora Aresco.
Aurelio remarcó que “es fundamental destacar al radicalismo, un espacio político que, aunque se encuentra golpeado a nivel nacional y enfrenta dificultades para proyectarse, está teniendo un buen desempeño en las provincias donde tiene gestión”. En este sentido, añadió: “El actual gobernador de Jujuy es un continuador de un gobierno radical anterior, encabezado por Gerardo Morales. Asimismo, Zdero, que gobierna Chaco y ha revalidado su apoyo en esta elección de medio término, también pertenece a este partido”.
Facundo Nejamkis coincidió en que “los verdaderos ganadores fueron los oficialismos provinciales, lo que confirma el buen juicio de los gobernadores al separar las elecciones locales de las nacionales”. Además, subrayó que “es evidente que para los dirigentes es eficiente hacer esto, pues, incluso en provincias donde Milei tiene una imagen muy positiva, lograron buenos resultados”.
“Ganó el oficialismo en Salta, en Jujuy, en Chaco y también en San Luis”, sostuvo, al tiempo que destacó que “La Libertad Avanza presenta luces y sombras, ya que ha comenzado a establecerse en provincias donde antes no tenía presencia, logrando resultados que le permitirán participar en las legislaturas locales”. Indicó que “en Salta obtendrá nueve diputados y un senador, aunque todavía no ha podido reflejar en las elecciones provinciales la misma performance que podría tener Milei en una contienda nacional”.
Gustavo Córdoba consideró que “el gran triunfador fue la gobernabilidad provincial en estas elecciones locales, donde lo nacional no juega un papel relevante. No estaba en juego el Gobierno nacional, ni se votaba por presidente”. “Lo que ocurre en las provincias es un asunto provincial”, añadió el analista de Zuban Córdoba y Asociados, diferenciando a La Libertad Avanza de los triunfadores. También destacó el surgimiento de una renovación en el peronismo en Chaco, con intendentes desafiando a Capitanich.
Por su parte, Facundo Nejamkis ubicó entre los perdedores al peronismo, especialmente en su vertiente kirchnerista, que perdió en Chaco y obtuvo una mala performance en Jujuy, un distrito que estuvo bajo intervención. “El panorama político argentino está conformándose como sistemas locales cada vez más desvinculados de lo nacional. En Salta, existe un espacio político liderado por Gustavo Sáenz, de origen peronista, pero el PJ de alcance nacional no alcanza ni el mínimo de 7 u 8 puntos”, explicó.
“Para tener éxito en ciertas provincias, es necesario distanciarse del peronismo”, agregó, destacando también que la izquierda se ha consolidado como una “representante política de minoría”, mientras que “el PRO, bajo el liderazgo de Mauricio Macri, ni siquiera figuró”.
Finalmente, Federico Aurelio afirmó que “el kirchnerismo es un perdedor, dado que no ha tenido un buen desempeño electoral”. Explicó que “el peronismo en su totalidad, y más cuando se encuentra fragmentado, como en Salta, ha hecho una mala elección”. Subrayó que “esto confirma lo que hemos estado discutiendo: el kirchnerismo, que lideró al peronismo en los últimos años durante las gestiones de Néstor y Cristina, ha ido perdiendo relevancia tanto a nivel territorial como ideológico”.El director de Aresco recordó que “hubo un tiempo en que tres de cada cuatro personas que se identificaban como peronistas se consideraban kirchneristas; hoy en día, esa cifra no alcanza a la mitad. Esta tendencia es especialmente evidente en el interior del país”.
“En el ámbito interior, prevalece más el peronismo federal, como quedó demostrado en las distintas provincias donde se votó recientemente. A excepción de Capitanich, quien mantiene una conexión significativa con Cristina, y aunque quedó en segundo lugar, no se puede considerar un resultado desastroso”, señaló.
Federico Aurelio explicó que Capitanich “obtuvo el segundo lugar debido a una alianza entre La Libertad Avanza y el oficialismo provincial y, además, porque en varias elecciones no ha logrado consolidar la unidad del peronismo”.
“En el caso de la izquierda, la única provincia donde habría podido tener alguna posibilidad era Jujuy, donde su referente histórico, Alejandro Vilca, se presentó como candidato. Aunque hizo una mejor elección que la que suele conseguir la izquierda a nivel nacional, su resultado fue inferior al de otras elecciones en la misma provincia, mientras que en el resto del país no tuvo presencia”, comentó el analista.
Por último, destacó que “el PRO tampoco fue relevante, dado que se comportó como un actor político sin impacto significativo; de los espacios nacionales, el único que tuvo cierto nivel de relevancia fue La Libertad Avanza”.
Gustavo Córdoba concluyó que “el gran perdedor fue el sistema político”. Este sistema ha visto un “aumento notable en la abstención electoral en las provincias” en 2023. “Existía un electorado frustrado que no se sintió representado en términos económicos y que finalmente terminó votando por Milei”.
“Estamos presenciando un fenómeno similar, con la diferencia de que en 2023 el presidente era Alberto Fernández y hoy es Javier Milei. Si comparamos todas las elecciones provinciales desde 1983 hasta la actualidad, esta ha sido la que registró la más baja participación electoral”, afirmó.