
Tras intensas negociaciones y la aprobación de importantes mercados, siendo el último el de China, se ha puesto en marcha el acuerdo de fusión entre Bunge y Viterra por US$18.000 millones. Esta transacción representa uno de los movimientos corporativos más significativos en el sector agroindustrial en la última década. Hace dos años, ambas multinacionales iniciaron los trámites regulatorios y los acuerdos relacionados con el traspaso de acciones y efectivo para concretar la operación. La compañía resultante se posiciona como líder global en soluciones agroindustriales integradas, con un valor de US$34.000 millones.
De acuerdo con los términos del acuerdo, a los que ambas empresas han accedido, los Consejos de Administración de Bunge y Viterra lo aprobaron por unanimidad. Los accionistas de Viterra recibirán aproximadamente 65,6 millones de acciones de Bunge, valoradas en unos 6200 millones de dólares, además de alrededor de 2000 millones de dólares en efectivo. Esto significa que la contraprestación será aproximadamente del 75% en acciones de Bunge y el 25% en efectivo. Los accionistas de Viterra poseerán el 30% de las acciones de la entidad fusionada, mientras que los de Bunge tendrán un 70%.
El nuevo gigante comercial tendrá, como se mencionó, un valor estimado de 34.000 millones de dólares, según reportó Reuters. A nivel global, Bunge se integra en el grupo conocido como las grandes ABCD, que incluye a Archer-Daniels-Midland Co., Bunge, Cargill y Louis Dreyfus. Estas compañías son fundamentales en la industrialización de la soja, así como en la producción de biodiésel y otros productos, además de en la exportación de granos y subproductos. Cabe destacar que en Argentina, Bunge y Viterra fueron parte de los interesados estratégicos en controlar, junto a la cooperativa ACA, la cerealera Vicentin.
Gregory Heckman, director ejecutivo de Bunge
Como parte de la transacción, las empresas informaron que Bunge asumirá 9800 millones de dólares en deuda de Viterra, relacionada con aproximadamente 9000 millones de dólares en Inventarios de Fácil Negociación de alta liquidez, con el objetivo de conformar “una sola empresa”.
La operación integra los activos de dos gigantes con presencia en más de 50 países, dando lugar a una firma con mayor capacidad de originación, almacenamiento, procesamiento y distribución de productos agrícolas, aceites, piensos y biocombustibles, según informaron.
“Hoy es un momento decisivo para nuestra empresa y nuestro equipo global al completar esta transformadora combinación de negocios. Agradezco a nuestros colegas, cuya energía, colaboración y compromiso nos han permitido alcanzar este hito. Juntos hemos formado una organización más sólida, con capacidades y experiencia mejoradas para satisfacer las necesidades cambiantes de nuestros clientes, maximizar el valor para nuestros grupos de interés y cumplir nuestro propósito común de conectar a los agricultores con los consumidores para suministrar alimentos, piensos y combustibles al mundo. Ahora comenzamos la emocionante tarea de unir nuestros equipos y operaciones, combinando nuestras fortalezas para alcanzar el máximo potencial de esta fusión”, afirmó Greg Heckman, director ejecutivo de Bunge.
La operación integra los activos de dos gigantes con presencia en más de 50 países y da lugar a una firma con mayor capacidad de originación, almacenamiento, procesamiento y distribución de productos agrícolasMarcelo Manera – LA NACION
Según comunicaron, la fusión permitirá mejorar el acceso a mercados clave, optimizar los costos logísticos y diversificar los riesgos comerciales, con el objetivo de estabilizar los flujos de caja y ampliar su red global.
La nueva compañía estará bajo la dirección de Gregory Heckman, director ejecutivo de Bunge, y John Neppl, director financiero de Bunge. David Mattiske, director ejecutivo de Viterra, se unirá al equipo de liderazgo ejecutivo de Bunge como codirector de operaciones junto con el argentino Julio Garros, quien anteriormente se desempeñó como copresidente de Agronegocios de Bunge. Como codirectores de operaciones supervisarán conjuntamente las actividades comerciales, incluida la gestión de las cadenas de valor globales de materias primas, así como los equipos de gestión nacionales y regionales, las iniciativas de combustibles renovables y las operaciones de seguridad industrial.
El proceso de fusión, indicaron, contó con el asesoramiento financiero de Bank of America Securities y el respaldo legal de Latham & Watkins LLP. La nueva entidad tendrá su domicilio legal en Ginebra (Suiza) y su sede corporativa en Saint Louis, Misuri (EE.UU.).
Entre los objetivos de la compañía fusionada se destaca la necesidad de contar con una mayor capacidad para satisfacer las demandas de mercados cada vez más complejos, lograr un mejor equilibrio de las cadenas de valor en distintas geografías, acceder a más mercados de origen clave y tener una red agrícola diversificada.
David Mattiske, director ejecutivo de ViterraViterra
Asimismo, mencionaron que la nueva compañía estará posicionada para conectar a los agricultores en las regiones de producción más grandes del mundo con las áreas de consumo de más rápido crecimiento.
Tras la transacción, la empresa fusionada espera obtener flujos de efectivo relativamente más estables gracias a su presencia más amplia y diversificada. Además, prevé que la fusión genere aproximadamente US$250 millones en sinergias operativas brutas anuales antes de impuestos dentro de los tres años posteriores a su finalización.
Bunge anunció su fusión con Viterra
Indicaron que también se espera que la mejora en el riesgo comercial y el perfil crediticio de la empresa impulse las eficiencias en su estructura de capital y los beneficios del costo de capital. Del mismo modo, la transacción, junto con la recompra de acciones asociada de US$2000 millones, aumentará las ganancias por acción ajustadas de Bunge en el primer año completo posterior al cierre y continuará mejorando con la realización de sinergias.