
CÓRDOBA.- Tras el anuncio del Ministerio de Economía de que solo se extenderá en julio la reducción de las retenciones para el trigo y la cebada, quedando excluida la cosecha gruesa —que incluye soja, maíz, sorgo y girasol—, las críticas desde el Gobierno de Córdoba no se hicieron esperar. “Es una gran injusticia. Sentimos tristeza y bronca”, manifestó el ministro de Bioagroindustria, Sergio Busso. También se unió a la crítica el exgobernador Juan Schiaretti.
“El gobierno nacional no cumple con su compromiso de eliminar impuestos perjudiciales y, en lugar de ofrecer un respiro al campo con la eliminación de las retenciones, retrocede en una medida que podría haber significado un alivio para este sector, que es el motor productivo de la economía”, sostuvo en sus redes sociales.
Schiaretti, quien sigue trabajando en la creación de un espacio político de centro, agregó: “¡Sáquenle el pie de encima al campo y dejen de tratar a los productores como enemigos, como durante tantos años hizo el kirchnerismo!”.
Los funcionarios cordobeses, al igual que sus pares santafesinos, han cuestionado constantemente las retenciones, insistiendo en la necesidad de implementar al menos una reducción progresiva. En este sentido, Busso reafirmó que están “totalmente en desacuerdo con un impuesto tan distorsivo que no tiene equivalentes en ningún otro lugar del mundo”.
“El dinero recaudado por las retenciones pertenece a los productores cordobeses, pero se queda en el Gobierno nacional, ya que no se coparticipa”, explicó, y señaló que el Ejecutivo nacional presenta “discursos ambiguos”. “A nivel nacional, el Presidente y el ministro de Economía dicen una cosa, pero luego actúan de otra manera. Aseguran estar en contra de las retenciones y comprometen su reducción; es un compromiso que debe cumplirse”.
El ministro advirtió que sus planteamientos no son “contra nadie, ni en contra de un Gobierno, sino en defensa de los cordobeses”. Reiteró que en la provincia, el sector agropecuario solo enfrenta el impuesto del Inmobiliario Rural, que regresa en un 98% en obras para el área.
También se pronunciaron en contra de esta decisión el ministro de Gobierno, Manuel Calvo, y el legislador Miguel Siciliano. Calvo calificó de “saqueo a los cordobeses” un impuesto que no se coparticipa; “de los miles de millones de pesos que el campo debe entregar, no regresa ni uno”.
Por su parte, la Bolsa de Cereales de Córdoba respaldó la decisión del Gobierno nacional y subrayó que este anuncio coincide con el inicio de la siembra de la campaña fina. “En este nuevo contexto, donde se proyecta con esperanza, valoramos positivamente el esfuerzo del Gobierno por extender la baja temporal de derechos de exportación para el trigo y la cebada”, indicó la institución, añadiendo que las condiciones agronómicas y del mercado “ofrecen una ventana de oportunidad”.
Sin embargo, también destacó la necesidad de avanzar hacia una estructura fiscal más equitativa que fomente la inversión, la diversificación productiva y el arraigo territorial.
“Invitamos al Gobierno nacional a invertir en la agricultura argentina y eliminar los derechos de exportación en las nuevas campañas y en cultivos como la soja, maíz, girasol y sorgo, cuyos derechos de exportación volverán a los niveles previos a la reducción a partir de julio próximo”, concluyó.