Beth Bechdol, directora Adjunta de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), alertó que en Gaza más de 500.000 personas enfrentan condiciones de hambruna y que solo quedan 235 hectáreas cultivables, una superficie que equivale a la “mitad del Central Park”. Este dramático diagnóstico lo presentó en Buenos Aires durante la octava edición del Agrievolution Summit 2025, la primera cumbre internacional de maquinaria agrícola que se celebra en Argentina, organizada por la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma) y promovida por Expoagro.
En su análisis, la funcionaria subrayó que las guerras y conflictos son el principal factor que explica el hambre en el mundo. “Actualmente, las cuestiones de seguridad alimentaria en las regiones en conflicto son más críticas que el cambio climático, los desastres naturales o las condiciones económicas. Los conflictos provocados por el ser humano son hoy el principal motor de la inseguridad alimentaria”, afirmó.
“Nuestro reporte más reciente mostró que 500.000 personas en Gaza están experimentando condiciones de hambruna”, aseveró Beth BechdolExpoagro
El caso de Gaza fue uno de los ejemplos más impactantes que compartió. “El conflicto en Gaza ha dejado solo 235 hectáreas cultivables, la mitad de lo que ocupa el Central Park en Nueva York. Nuestro reporte más reciente mostró que 500.000 personas en Gaza están enfrentando condiciones de hambruna”, sostuvo.
Bechdol instó a la comunidad internacional a poner fin a la violencia y priorizar el acceso a los alimentos. “Las hostilidades deben cesar ahora mismo. Lo más urgente es que la población local tenga acceso a la alimentación básica, que puedan comer y contar con una cantidad mínima de nutrientes”, enfatizó.
La FAO está colaborando con otros organismos del sistema de Naciones Unidas para abrir corredores humanitarios. “Todo lo que estamos haciendo es instar al cese del fuego, a que se detengan los ataques y, sobre todo, que haya acceso a alimentos y asistencia humanitaria”, precisó.
La funcionaria advirtió que el futuro de Gaza es incierto. “No está claro cómo se verá Gaza en las próximas semanas y meses. Pero si en algún momento se logra revertir la situación, la FAO tendrá un rol fundamental en la reconstrucción: invernaderos, pozos de irrigación y sistemas de producción de alimentos que han sido destruidos”, adelantó.
Bechdol alertó sobre otro problema, la contaminación de la tierra por minas y explosivos: “Probablemente hay una cantidad significativa de campos afectados. Nuestra tarea será ayudar a revivir esa producción local”,Expoagro
Además, enfatizó sobre otro problema: la contaminación del suelo debido a minas y explosivos. “Es probable que haya una cantidad considerable de campos perjudicados. Nuestra misión será ayudar a recuperar esa producción local”, indicó.
Por otro lado, ante LA NACION, Bechdol se refirió a la inseguridad alimentaria en el mundo: “A pesar de que ha habido una leve mejora desde el Covid por primera vez en muchos años, los niveles de inseguridad alimentaria y pobreza son alarmantemente altos: cerca de 630 millones de personas, un 8% de la población mundial, padecen inseguridad alimentaria”.
La ejecutiva de la FAO también habló sobre los cambios que requiere la cooperación internacional. “Necesitamos trabajar de manera diferente a partir de ahora. Ya no podemos depender exclusivamente del financiamiento tradicional de los países miembros, necesitamos hallar nuevos socios y explorar diversas formas de aportar investigación, conocimiento, datos y tecnología”, afirmó.
Bechdol subrayó que el sector privado será un actor clave en esa transformación. “Mi opinión es que el mejor lugar para hallar esos recursos es el sector privado. Si compartimos los mismos principios y motivaciones, debemos buscar oportunidades para unir fuerzas y poner nuestro liderazgo técnico al servicio de los agricultores”, declaró. En particular, resaltó la importancia de la mecanización agrícola. “Considero que la mecanización es un ámbito natural donde el sector privado puede aportar tecnología, especialmente en África y otros países que requieren mejoras urgentes en productividad agrícola”, explicó.
Bechdol reconoció que, en el actual contexto geopolítico, la ONU ya enfrenta recortes en sus proyectosExpoagro
Bechdol reconoció que la ONU ya enfrenta recortes en sus proyectos debido al actual contexto geopolítico. “En febrero recibimos la noticia de que el gobierno de Estados Unidos estaba finalizando un gran número de nuestros programas, aunque no aquellos relacionados con la mecanización”, manifestó.
En esta línea, planteó posibles esquemas de colaboración. “Podemos compartir datos con el sector privado o cofinanciar un proyecto para llevar equipamiento agrícola a Zambia o Sierra Leona. La relevancia de esta alianza va más allá del financiamiento: se trata de cómo enseñamos a los agricultores nuevas tecnologías y mejoramos su productividad”, destacó.
La directora adjunta de la FAO también dirigió parte de su mensaje a los productores argentinos. “Argentina ha realizado enormes avances en prácticas de producción agrícola sostenibles, en la adopción de la siembra directa, el secuestro de carbono, la protección de los animales y los progresos en la mecanización agrícola”, afirmó.
Para Bechdol, estas experiencias son un ejemplo a compartir con el resto del mundo. “Los argentinos tienen la oportunidad de trasladar estas prácticas a agricultores de otras regiones. Observar este liderazgo [en este evento], sumado a la presencia de funcionarios que comprenden estas prioridades, es algo muy positivo”, subrayó.
En este sentido, animó a que el país continúe en esa senda. “Mi mensaje para los agricultores argentinos es que sigan liderando y que siempre aspiren a más. Me encantó observar en estos días las prácticas sostenibles, el compromiso con el secuestro de carbono y los avances en mecanización. Todo esto puede llevarse a otras partes del mundo”, afirmó.
El dramatismo de los datos sobre Gaza permeó el panel “Desafíos para alcanzar la seguridad alimentaria”. La referencia a las 235 hectáreas cultivables que aún permanecen refleja la magnitud de la tragedia humanitaria. Bechdol buscó cerrar su exposición con un mensaje esperanzador. “Si logramos cesar las hostilidades, si conseguimos facilitar la asistencia y luego reconstruir, estoy convencida de que Gaza podrá volver a producir alimentos. Y la FAO estará allí para apoyar ese proceso”, concluyó.
