El sector cerealero expresó su enérgico apoyo a la reforma laboral propuesta por el Gobierno y firmada este jueves por la mañana por el presidente Javier Milei. El documento ingresará formalmente al Congreso de la Nación para ser tratado en sesiones extraordinarias.
El proyecto de Modernización Laboral incluye un apartado de Medianas Inversiones (RIMI) y ajustes fiscales, que establece mínimos de inversión para gozar de beneficios. Incorpora esquemas de amortización acelerada para activos invertidos (incluyendo cuota única para equipos de riego y alta eficiencia energética) y la posibilidad de acceder a la devolución del saldo técnico de IVA a partir del tercer período fiscal de acumulación.
Las Bolsas de Cereales de Bahía Banca, Buenos Airesm Córdoba, Entre Ríos, Chaco, Rosario y Santa Fe publicaron un comunicado para expresar su apoyo a la reforma propuesta. Aseguró que el proyecto es “un paso muy positivo y necesario para fortalecer la competitivdidad de la economía argentina” y destacaron especialmente el RIMI, considerada una “herramienta clave” para generar “mejores condiciones de inversión en el sector agropecuario”. Además, especificaron que es una manera de “promover el crecimiento productivo, la incoporación de tecnologóa y la ampliación de la capacidad instalada”.
Otra de las entidades del sector en pronunciarse fue la Federación Argentina de la Industria Molinera (FAIM). En nombre de su presidente, Diego Cifarelli, la entidad aseguró que la reforma es “un paso estratégico para avanzar en las reformas estructurales que el país necesita para generar condiciones de crecimiento económico y mayor empleo”.
Con visto bueno en el RIMI, la FAIM reconoció que trabajó con el Gobierno y el Consejo de Mayo para la elaboración del proyecto “con la plena convicción que genera más inversiones en el sector, más producción y agregado de valor y, con ello, más empleo e ingresos de divisas para la economía”.
La reforma laboral tuvo el respaldo explícito del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), que también participó en la elaboración del proycto. Reconoció la importancia del RIMI y consideró que ambos proyectos “van a generar un efecto positivo en las inversiones, el empleo, producción y las exportaciones agroindustriales en una crifra incremental de alrededor de USD 15.000 millones. También aseguró que traerá ”beneficios para productores agropecuarios” y reafirmó su compromiso con el Senado “para lograr que se avance y se adopten mejoras para lograr la plena competitividad”.
