
Durante junio se registraron 46 conflictos laborales con paro, lo que representó un descenso de 10% con relación al mismo mes del año anterior y de 22% con respecto a mayo de 2025, según informó este miércoles el Ministerio de Capital Humano, a través de la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
En junio último, la cantidad de huelguistas (249.709) experimentó un retroceso de 34% y de 61% con respecto a mayo de este año. La cantidad de jornadas individuales no trabajadas (338.721) se comportó de igual modo, registrando una caída de 28% en comparación con junio de 2024 y de 57% respecto de mayo de 2025.
La menor conflictividad obedece a que los gremios ya no pelean sólo por salarios y comienzan a concentrarse también en las problemáticas particulares, explican en medios oficiales.
En este sentido, fuentes de la cartera laboral sostienen que se observa un giro en la actitud de los sindicatos ya que “antes con la inflación, los gremios venían, reclamaban aumentos y listo”. Incluso hay algunos sindicatos que creen que su lucha pasa por pelear mejoras salariales pero no por puestos de trabajo porque “la desocupación es un problema del Gobierno”. De hecho, los gremios nunca enarbolaron la lucha contra el trabajo informal que hoy se ubica casi en un 40%.
También la disminución en la conflictividad responde a una actitud más madura de las tres partes involucradas, es decir los gremios, los empresarios y el Estado, en un contexto en el que “se fomenta el diálogo”.
En este sentido, se resalta un cambio en el rol del Ministerio de Trabajo y afirman que “no estamos para imponer, estamos para arbitrar”. Y agregan que la consigna fundamental que anima a la secretaria de Trabajo es “erradicar la violencia en los conflictos colectivos”.
Esto se traduce en que desde el Gobierno se impulsa a que “ningún sindicato obligue a un trabajador a hacer lo que no quiere”, un fenómeno que también explica la baja en la cantidad de huelgas.
Al desagregar las estadísticas sobre conflictividad laboral, se observa que, en el ámbito estatal, entre junio de 2024 y junio de 2025, se produjo un crecimiento en la cantidad de conflictos con paro (+6%) aunque con un descenso moderado de la cantidad de huelguistas (-1%) y un poco más intenso de las jornadas no trabajadas (-15%).
Por el contrario, en igual período, la conflictividad laboral en el ámbito privado registró un descenso en los tres indicadores: cantidad de conflictos con paro (-44%), de huelguistas (-94%) y de las jornadas no trabajadas (-73%).
Causas de los paros
En cuanto a las causas que motivaron los conflictos con paro en junio de 2025, se destacaron los reclamos por mejoras salariales (27 conflictos) y las demandas por pagos adeudados (6 conflictos). Entre junio de 2024 y junio de 2025 se observó un creciente predominio de los conflictos originados por mejoras salariales, que pasaron de representar un 49% del total a un 59%. Por el contrario, los conflictos vinculados a despidos disminuyeron tanto en nivel absoluto (de 9 a 3) como en términos relativos (de 18% a 7%).
Al considerar los sectores de actividad, se observó que, el mes pasado, el 89% de los conflictos con paro se registraron en la Administración pública (13), la Enseñanza (13), la Salud (10), y la Industria manufacturera (6). Entre junio de 2024 y junio de 2025, la Administración pública, aunque con una participación absoluta y relativa en descenso (de 39% pasó a 28%), continúa siendo la actividad con el más alto nivel de conflictividad.
Durante junio de 2025, la mayor cantidad de conflictos se produjeron en las provincias de Buenos Aires (10), Entre Ríos (4), Jujuy (4) y Santa Cruz (4).
En lo que refiere a la conflictividad laboral sin paro, en junio de 2025, se registraron 117 conflictos, representando un aumento de 48% con respecto a junio de 2024, y se mantuvo constante en relación con mayo de este año. Las acciones mayormente desplegadas fueron: la concentración (43), seguida por la declaración organizativa (21) y la movilización (23).
Por último, en cuanto al principal motivo que originó los conflictos sin paro en junio de 2025, se encontraron: las mejoras salariales (45), seguidos por los despidos o no renovación contractual (23), los pagos adeudados (19) y otros reclamos (17) donde se registraron aquellas demandas en rechazo a las políticas gubernamentales.
Preocupación de los trabajadores
En cuanto a las perspectivas, los gremios están traslado a las autoridades su preocupación por el impacto de las importaciones sobre la actividad de las empresas locales, particularmente las pymes que son las que más les cuesta competir.
En cuanto al sector público, en medios sindicales se considera que continuarán los despidos en el Estado y un nuevo factor de inquietud es el avance de las privatizaciones que podría derivar en una reducción en la nómina de trabajadores.