
Luego de la dura derrota en las elecciones legislativas, el Partido Justicialista reunió a su conducción nacional para analizar el panorama interno y definir una estrategia común frente a las reformas que el Gobierno busca aprobar en el Congreso. La cumbre se realizó este martes por la tarde en la sede partidaria y estuvo atravesada por el malestar por el retroceso electoral y las tensiones dentro del bloque de Unión por la Patria (UxP) en Diputados.
La reunión se celebró en un contexto de crecientes versiones de ruptura protagonizadas por los legisladores alineados con el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, uno de los mandatarios provinciales peronistas considerados “dialoguistas”. Sus conversaciones con la Casa Rosada, que busca asegurarse apoyo para el Presupuesto 2026 y para un amplio paquete de reformas —laboral, previsional, tributaria y del Código Penal— encendieron alarmas en el PJ.
Durante el encuentro, los dirigentes buscaron unificar criterios para enfrentar las iniciativas oficiales. El bloque de UxP en Diputados, encabezado por Germán Martínez, trabaja en una contrapropuesta de reforma laboral que pretende presentar en el Congreso como alternativa al proyecto oficial.

Máximo Kirchner fue uno de los oradores centrales y convocó a fortalecer la unidad interna. “Qué bueno que estén acá, que le estén metiendo a esto, que estén siempre atentos y ayudando a la compañera Cristina, que también está trabajando todos los días y recibiendo gente”, planteó. Además, cuestionó las reformas impulsadas por el presidente Javier Milei y las comparó con las del macrismo tras las elecciones de medio término. “Reforma laboral, previsional, ambiental: todas orientadas a elevar los márgenes de ganancia, pagando menos impuestos y menos salarios”, sostuvo.
En la previa al encuentro, Cristina Kirchner había recibido en su departamento de Constitución a un grupo de economistas, que le acercaron un documento sobre “un modelo económico nacional de crecimiento productivo y federal para el siglo XXI”. La expresidenta permanece allí bajo prisión domiciliaria por la condena en la causa Vialidad.
La conducción del PJ estuvo encabezada por el vicepresidente primero, José Mayans, acompañado por Germán Martínez, Mariel Fernández, Ricardo Pignanelli y Lucía Corpacci.
Mientras tanto, crece la incertidumbre sobre el futuro del bloque de UxP en la Cámara baja. Jalil evalúa conformar una bancada propia integrada por los diputados Fernanda Ávila y Sebastián Nóblega —con mandato hasta 2027—, y por los legisladores electos Fernando Monguillot y Claudia Palladino, que asumirán el 10 de diciembre. Otra alternativa en estudio es que este grupo se incorpore al interbloque Innovación Federal, que nuclea a representantes cercanos a los gobernadores Gustavo Sáenz (Salta), Hugo Passalacqua (Misiones) y Alberto Weretilneck (Río Negro).

La cumbre cerró sin definiciones contundentes, pero con un mensaje unificado: el PJ buscará recuperar cohesión en el Congreso para enfrentar un escenario legislativo adverso y resistir las reformas estructurales que el Gobierno pretende acelerar.




