El presidente de la Departamental del Justicialismo, Gustavo Osuna, respondió las críticas del radicalismo: “Me sorprendió ver que los concejales radicales denuncian que el peronismo respete los tiempos institucionales, corrija eventuales errores, haga valer las reglas institucionales y las mayorías circunstanciales y tenga ordenado el bloque partidario, que es un principio de la democracia y del sistema republicano” sostuvo. “Nosotros no nos llenamos la boca con estos principios, como hacen los radicales, porque nosotros simplemente solemos respetar estos principios”, agregó en un comunicado enviado a INFORME DIGITAL.Para Osuna, la crítica de los concejales opositores no responde a cuestiones de fondo, en tanto argumentó que “Eso pasa siempre: nunca discutir nada de fondo, sino de forma. Es la delicadeza de los radicales para que nadie recuerde sus propios gobiernos, sus incoherencias, sus cambios de postura y su completo pragmatismo”. “Hacen de la forma el contenido” abundó, “y por eso dicen un día una cosa y otro día otra. Pero esto es verdaderamente original, gracioso: denuncian que se respetan las formas institucionales. Creo que les cambiaron el libreto del alarmismo y las denuncias”. “Denunciar que se llama a sesiones extraordinarias antes de que empiecen las sesiones ordinarias es ridículo, quejarse porque los concejales radicales tienen que trabajar un sábado es otra cosa, pero que lo digan claro. Sé que debe ser un trabajo arduo encontrar todos los días un nuevo motivo para estar en contra de la gestión activa del municipio, y sobretodo teniendo que hacerlo sin que nadie recuerde a De La Rúa, a Montiel y a Varisco, pero para eso los han elegido: si lo que quieren es no trabajar un sábado, y quieren por eso hacer una denuncia, supongo que tendríamos que tener, además de la Dirección de Trabajo, una nueva dirección para que los concejales radicales puedan hacer su descargo administrativo; pero mientras tanto, su tarea es ir a debatir los fundamentos ideológicos, políticos y doctrinarios por los cuáles defienden que los que más tienen, que los que más servicios municipales gozan, no deben ser solidarios con los paranaenses que menos tienen”. Ese es el fondo de la cuestión, y va a seguir siendo el mismo un sábado a la mañana de febrero, como un lúnes al mediodía de marzo.
