Se trata de una enfermedad rara pero extremadamente seria causada por una familia de virus conocidos como hantavirus, consignan las páginas digitales que informan sobre el mal. Las personas que están más expuestas al contagio, son las que tienen contacto con roedores ó áreas infectadas con roedores.
El virus se encuentra en la orina, la saliva y la excreta del animal y se mezcla con el aire por medio de la brisa o el polvo. La manera principal en que el hantavirus se trasmite a los seres humanos es al respirar el aire contaminado con orina, excreta o saliva del roedor. Puede también ser transmitida manipulando roedores o al tocarse la nariz o la boca después de manipularlos.
El deceso de Pereyra causó conmoción en el barrio Santa Rita de nuestra ciudad, donde vivía, y reavivó el reclamo –expresado desde la comisión vecinal– por la cantidad de ratas que asolan el vecindario.
Pereyra era pintor y tenía cuatro hijos. Empezó a sentirse enfermo el domingo 18, con síntomas similares al de una gripe y dolores musculares. El cuadro fue complicándose hasta que el jueves, murió en el Hospital Militar.




