El proceso para que el agua extraída del río Paraná se vuelva potable y el sistema que posibilita su distribución en la ciudad, cuestan. Y saber la magnitud de esos montos adquiere especial interés en estos días, cuando el calor aprieta y ha habido consumos récords.Según un informe elaborado por la Subsecretaría de Saneamiento municipal, producir el agua y ponerla en la red demandó en 2009 a razón de 2.299.404 de pesos por mes; es decir, unos 27.592.848 de pesos anuales.Mientras, y en consonancia con esos números, lo que la Comuna recaudó por ese servicio específico no alcanzó a cubrir la erogación total.En un análisis aún más detallado, el informe consigna que tratar y distribuir cada metro cúbico de agua -es decir, mil litros- le terminó costando el año pasado a la Comuna 55 centavos. Es que -según los datos-, la producción diaria promedio de agua rondó los 138.300 m3 (es decir, 138,3 millones de litros), lo que demandó una inversión también diaria de 76.646,79 pesos.En la composición del costo operativo interviene la mano de obra, el consumo de energía eléctrica, los productos químicos usados para la potabilización, amortización de las obras y un ítem titulado Otros insumos. CostosLa mano de obra es la erogación con más peso en la conformación de costos operativos. Equivale al 53% del gasto total y en números se traduce así: 40,7 mil pesos por día y 1,2 millones al mes. Incluye el pago de haberes, adicionales, horas extras, seguros y cargas sociales de todos los agentes que participan directamente en el proceso de producción del agua potable (operación y mantenimiento de las instalaciones de captación del agua cruda del río, transporte de la misma hasta las plantas potabilizadoras, potabilización del agua cruda y ejecución del control de calidad), puntualiza el informe.El segundo lugar, con el 24%, lo ocupa el consumo de energía eléctrica. Se trata de una erogación en pesos de 17,3 mil diarios y de 520,350 por mes. Al respecto, se informó desde la Subsecretaría que con electricidad funcionan los equipos de bombeo de la toma de agua, los de impulsión del agua cruda hasta las plantas potabilizadoras y los distintos dispositivos de cada una. Cabe recordar, que la ciudad cuenta con dos plantas: una, ubicada en avenida Ramírez y la nueva, situada en las calles Echeverría y Rondeau. Justamente, con la puesta en marcha de ese sistema -que incluye tres centros de distribución- se advirtió desde la Comuna, en su momento, que requeriría un mayor costo y se mencionó especialmente, el consumo de energía.A la electricidad, le sigue el uso de productos químicos con el 11% de las erogaciones. Es que se utilizan sustancias por valor de 242 mil pesos mensuales, lo que equivale a un gasto de unos 8 mil pesos diarios. Los productos químicos son utilizados en los distintos procesos inherentes a la potabilización del agua cruda y se menciona el cloro, el sulfato de aluminio, el policloruro de aluminio, la cal y el flúor.En la lista continúa con un 7%, el renglón titulado Amortizaciones. Comprende “las obras civiles (muelles de la toma, obras en las plantas, etc.), las obras y dispositivos eléctricos (tableros, conducciones, etc.), las obras y equipos electromecánicos (bombas, motores, etc.) y los dispositivos electrónicos (sistemas informáticos para el control, operación y seguimiento de los procesos, sensores, automatismo, entre otros)”. En este concepto, se gastan por mes unos 183 mil pesos -6,1 mil pesos por día-.Otros insumos es la última cuenta, que equivale al 5% -unos 130 mil pesos mensuales- de los gastos. El punto incluye “los costos de seguridad y vigilancia de las instalaciones, los materiales para reparaciones de trabajos ejecutados con personal propio (electricidad, tornería, soldaduras), las reparaciones de equipos especiales realizados por terceros, los insumos de laboratorio para el control de calidad (reactivos, elementos de trabajo)”.RecuperoDe los 55 centavos que costó en 2009 cada metro cúbico, la Comuna obtuvo un recupero de 45 centavos a través del cobro a los contribuyentes de la tasa por el servicio del agua. Según explicó Juan José Moreno, titular de la Subsecretaría de Saneamiento, el cálculo se realizó en base a lo que específicamente se recaudó por el servicio de provisión del suministro. Así las cosas, el nivel de ingreso equivalió a un 82% del costo, mientras que el resto (12%) fue afrontado por el Municipio, como viene ocurriendo. Fue “subsidiado”, dijo Moreno, quien ante la consulta sobre si se ha delineado alguna estrategia para revertir ese desfase, acotó que la idea es “colaborar con la gente de la Afim (Agencia Fiscal Municipal) aportando en forma rápida los datos de, por ejemplo, las nuevas conexiones para que el cobro” se canalice. Además, informó que parte de la estrategia consiste en bajar costos operativos. En 2009, ilustró, se hizo un trabajo tendiente a disminuir el consumo de energía eléctrica. Es que, contó, que en los primeros tiempos de la puesta en marcha de la nueva planta potabilizadora, se usó -por momentos- más electricidad de la que se requería. Atribuyó la situación a lo novedoso del sistema y a la falta de experiencia. A eso añadió, la regulación de válvulas a medida que baja el consumo de agua. Eso hace que, a la par, se aminore el nivel de bombeo y, por lo tanto, descienda el consumo de electricidad. Seguidamente, afirmó que el trabajo, tendiente a optimizar el presupuesto, se continuará durante este semestre. Aunque, en relación a los costos, opinó que son “valores aceptables” en vista de que se trata de una prestación esencial.Fijan controles para el uso de la toma de Avenida Ramírez“Producir el agua cuesta mucho”, se dice desde Obras Sanitarias municipal, cada vez que el tema gira en torno del uso y derroche. A la aplicación de multas por el lavado de autos y veredas a deshora, se informó la decisión de aplicar “estrictos controles” a la utilización de la toma de agua, ubicada al frente de la planta potabilizadora de Avenida Ramírez, de donde se proveen camiones cisternas públicos y privados. Héctor Fontana, jefe de Departamento de Micromedición de la Dirección, dijo que se colocó un medidor y que la idea es que se cobre un canon a quienes quieran llevar agua de esa toma. Es que, según explicó, la provisión no tenía ningún control, por lo que era habitual observar camiones de empresas de venta de agua envasada cargando miles de litros. También, según Fontana, de esa toma se abastecían empresas constructoras y, en ocasiones, han acudido camiones de transporte de combustibles, que para arreglar el tanque necesitan llenarlo de agua.“Se trata de agua potable que (su producción) implica un costo elevadísimo”, remarcó Fontana, al justificar las disposiciones de control y de aplicación de un canon. Respecto de este último punto -el cobro de un arancel-, informó que el tema estaba siendo analizado con los funcionarios de Hacienda. En tanto, para los vehículos municipales que concurren a abastecerse, también se establecieron requisitos: deberán presentar una autorización del área correspondiente.Paralelamente, el funcionario dio cuenta de otra medida: se instará a quienes concurran en busca de agua para riego u otros fines que no requieren potabilización, el uso de una cañería que provee de suministro sin tratamiento. Esa red está ubicada al lado de la de agua potable, y no se usaba desde hace mucho, acotó. (Fuente: El Diario)
