Algunos de los motivos que impulsan la marcha son: Aumentar el número de productores y los jóvenes agrarios puedan quedarse en el campo, a través de programas de colonización.
Generar trabajo genuino, cambiando el asistencialismo por la cultura del trabajo y lograr educación y salud para todos.
Lograr una ley que establezca límites a la extranjerización de tierras. Solución definitiva el problema del endeudamiento con el Banco de la Nación Argentina.
Recuperar herramientas fundamentales del sector agropecuario, como lo son la Junta Nacional de Granos. Establecer un marco legal que controle a los pools de siembra.
Piden también que el sistema impositivo deje de ser regresivo y pueda lograrse un esquema más simple y justo y las economías regionales tengan políticas diferenciadas.
Abogar para que los organismos específicos del sector INTA, SENASA, tengan presupuestos y trabajen para los verdaderos productores agropecuarios.