Dos gigantes del agro, la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) y Bunge, incursionaron de lleno en el negocio de los biológicos. Las empresas, que ya trabajan en conjunto en el área de fertilizantes tras haber adquirido hace varios años un negocio local de la norteamericana Mosaic, ahora apuestan a incorporar productos basados en microorganismos vivos para “potenciar el rendimiento de los cultivos” y, a la vez, reducir la huella de carbono.
La iniciativa, aseguraron, responde a una tendencia global: cada vez son más las compañías que tradicionalmente fabricaban fertilizantes minerales las que compran firmas biotecnológicas para sumar soluciones biológicas a su oferta. En Mosaic, ese giro se materializó con la adquisición de Plant Response Inc. en 2022, que dio origen a Mosaic Biosciences, su división especializada en biotecnología agrícola.
“Que una compañía como Mosaic —el productor más grande del mundo de fósforo y potasio— haya decidido incorporar biológicos genera un cambio enorme. Porque le estamos agregando un componente que permite sacarle mayor provecho a lo que el productor ya aplica, al mismo tiempo que sostenemos el recurso suelo, que es fundamental para las próximas generaciones”, destacó Oscar Pérez, gerente internacional de Productos Premium de Mosaic.
“Reducir la fertilización mineral solo empobrece los suelos. Nosotros pensamos en complementar los fertilizantes”, explicó Jorge Dagieu, director comercial para Latinoamérica de Mosaic BiosciencesCarlos Castro – Europa Press – Carlos Castro – Europa Press
El ejecutivo explicó que la empresa viene de “trabajar con el concepto de nutrición balanceada, que en Mosaic se ha enseñado y practicado durante los últimos 20 años”, pero que el nuevo paso es avanzar hacia una nutrición avanzada, que “consiste en mantener las prácticas basadas en la ciencia del suelo y del fertilizante, pero agregándoles nuevas tecnologías, como los biológicos”.
Desde la compañía aclararon que los biológicos no buscan reemplazar la fertilización mineral, sino potenciarla. “Reducir la fertilización mineral solo empobrece los suelos. Nosotros pensamos en complementar los fertilizantes”, explicó Jorge Dagieu, director comercial para Latinoamérica de Mosaic Biosciences.
Esa complementariedad, señalaron en la firma, es precisamente lo que impulsa el crecimiento del negocio de los biológicos a nivel global. Cada vez más empresas de fertilizantes minerales incorporan líneas biotecnológicas o adquieren startups del sector. Mosaic, por ejemplo, consolidó ese cambio en 2022 con la compra de Plant Response Inc., que dio lugar a Mosaic Biosciences, dedicada al desarrollo de soluciones biológicas aplicadas a la nutrición vegetal.
“Antes se hablaba de una industria muy fragmentada, con empresas chicas, pero ahora estamos viendo compañías más consolidadas, que crecieron a través de adquisiciones”, explicó Dagieu. “Es lo que pasó con nosotros: Mosaic compró a Plant Response y hoy formamos parte de una empresa mucho más grande. Las grandes del agro están incorporando biológicos para ofrecer una propuesta más completa al productor”, agregó.
El desarrollo de estos productos implicó también un desafío técnico. “Es muy distinto tener condiciones de laboratorio o invernadero que aplicar entes vivos en suelos expuestos a altas temperaturas, sequía o salinidad. Y esos biológicos tienen que funcionar igual. Ese es el gran desafío y Mosaic Biosciences ha logrado capturar esos biológicos de forma tal que, cuando se aplican al suelo, empiecen a actuar como corresponde”, explicó Pérez.
En ese marco, la empresa formuló complementos biológicos que contienen bacterias de la familia Bacillus, que una vez incorporadas al suelo “actúan como promotoras del crecimiento y solubilizadoras de nutrientes”, detalló Dagieu. “Estas formulaciones fueron diseñadas para ser agregadas a los fertilizantes sólidos o líquidos, con una supervivencia de hasta 24 meses”, añadió.
Los ensayos realizados en la Argentina mostraron respuestas positivas en casi todos los cultivos. “En nuestro programa de investigación encontramos respuestas promedio de cinco quintales por hectárea en maíz, dos quintales en soja y casi cuatro en trigo. Los resultados son contundentes: hay una sinergia clara entre la fertilización y la adición de biológicos”, aseguró el especialista.
“En nuestro programa de investigación encontramos respuestas promedio de cinco quintales por hectárea en maíz, dos quintales en soja y casi cuatro en trigo. Los resultados son contundentes: hay una sinergia clara entre la fertilización y la adición de biológicos”, aseguró el especialista
Pérez añadió que Mosaic trabaja en tres escalas de validación: ensayos internacionales en Estados Unidos, Canadá y Europa; pruebas regionales en México y Argentina y estudios conducidos por clientes y universidades, entre ellas la Universidad Nacional de La Pampa, con el equipo del doctor Martín Díaz Zorita, que evaluó los productos durante dos campañas de maíz. “En esos ensayos vimos respuestas de rendimiento que van del 2,5% al 27% respecto del testigo, según las condiciones de suelo y manejo —precisó—. Si tomamos un promedio, podemos hablar de un 4 a 5% de incremento, lo que está por encima del rango habitual que se considera exitoso para biológicos, que suele ser del 2 al 3%”.
Respecto de la adopción, Dagieu admitió que todavía es un proceso en evolución, pero que avanza de manera sostenida. “Es una categoría con muchísimos apodos o sobrenombres, y eso genera cierta confusión. Por eso nos apoyamos en investigadores, no solo de Argentina sino de todo el mundo, que nos ayudan con resultados y trabajos para contar con información real y confiable. Así ganamos la confianza del productor, que sepa que estamos hablando de algo probado y validado”, señaló.
La línea se presentó oficialmente en el país con el lanzamiento de PowerCoat y BioPath, dos formulaciones que permiten integrar biológicos a la práctica de fertilización tradicional. ACA y Bunge tienen la distribución exclusiva en la Argentina. “Estos complementos biológicos representan un valor agregado para que el productor maximice su rentabilidad dentro de su plan de fertilización, sumando innovación y eficiencia con una menor huella ambiental”, remarcó Dagieu.