El tribunal de la Sala II de la Cámara del Crimen de Paraná condenó ayer a cinco años de prisión efectiva por el delito de Extorsión a Alfredo Bernini, acusado de amenazar con un cuchillo a un escribano para exigirle la confección de un recibo cancelatorio de una deuda que mantiene su concubina con un abogado, a raíz de la firma de un contrato mutuo con garantía hipotecaria. Por su parte, su mujer Patricia Paris fue condenada a dos meses de prisión condicional por el delito de Estafa procesal en grado de tentativa, ya que pretendió inducir en error a un juez Civil para obtener una ventaja patrimonial en desmedro de su acreedor y cancelar la deuda hipotecaria contraída sin haberla pagado.Bernini llegó a juicio procesado por el delito de Coacción agravada por el uso de arma, pero el tribunal dio lugar al pedido formulado por el fiscal José María Chemez y el querellante Alejandro Grippo de encuadrar el delito en la figura de Extorsión, que contempla una pena de cinco a 10 años de prisión. Los camaristas Jorge García, Raúl Herzovich y Teresita Nazar se basaron en que hubo intimidación y violencia en el accionar del imputado, que buscaba con el documento producir un efecto jurídico en perjuicio de su acreedor.El 14 de noviembre a las 12.30 se leerán los fundamentos de la sentencia. Desde ese día la defensa tendrá 10 días para evaluar si recurre en Casación ante el Superior Tribunal de Justicia. La causaTodo tiene origen en una deuda contraída a raíz de la firma de un contrato mutuo con garantía hipotecaria celebrado el 27 de diciembre de 2001 con el abogado Raúl Avero por una suma cercana a los 6.000 pesos-dólares. Según la acusación del fiscal José María Chemez y el querellante Alejandro Grippo, el acusado logró que el escribano José Luis Zuffiaurre, en contra de su voluntad, le extendiera de su puño y letra el recibo exigido por el monto total del préstamo.Para los acusadores dicha conducta fue desplegada por Bernini en connivencia con su concubina, Patricia Paris, y la misma apuntaba a valerse del recibo ilegítimamente obtenido a los fines de iniciar demanda por cancelación hipotecaria. A esta maniobra la mujer la concretó el 10 de junio de 2003, oportunidad en que formalizó la acción ante el Juzgado Civil y Comercial Nº 8 de Paraná, dando lugar a los autos que tramitan bajo la carátula “PARIS, Patricia Mabel c/AVERO, Raúl Alberto- Sumario”, expediente que actualmente se encuentra en trámite. Según argumentaron, la mujer, sustentada en el presunto recibo, persiguió la cancelación de la hipoteca. Asimismo señalaron que valiéndose de un documento espurio, obtenido por medios ilícitos e intrínsecamente falso, Paris pretendió inducir en error al juez para obtener una ventaja patrimonial en desmedro de su acreedor y demandado, Raúl Avero.Argumentos de la defensaPara el abogado defensor Elvio Garzón, quien peticionó la absolución del matrimonio, no hay extorsión porque el recibo no puede producir efecto jurídico, ya que no reúne los requisitos formales como para producir el levantamiento de la hipoteca. Garzón argumentó que el recibo no dice que se cancela el mutuo hipotecario, ya que el escribano necesitaba la autorización de Raúl Avero.No obstante, Garzón había subrayado que si el tribunal entendía que podría producir ese efecto jurídico, existe un concurso aparente de leyes en el que al relacionar conjuntamente ambos tipos legales, el de la coacción agravada excluye a la extorsión, ya que reúne por el principio de las especialidades una conducta más característica de la coacción agravada. Por eso solicitó en forma subsidiaria la pena de tres años condicional para Bernini, sosteniendo además que la conducta desplegada es un concurso ideal. Por su parte, para Paris el abogado solicitó un mes de prisión condicional en caso que el tribunal crea que la mujer incurrió en el delito imputado. DemoraLa lectura de la parte resolutiva de la sentencia estaba fijada para las 12.30, pero a raíz de la demora del imputado Alfredo Bernini se leyó casi una hora después. El hombre, que estaba en libertad llegó en moto a Tribunales. Luego de conocer la sentencia condenatoria fue trasladado a la Unidad Penal Nº1 en Paraná donde cumplirá la sentencia.




