
SANTA FE.- Hasta ayer, cinco grupos empresariales se inscribieron para ofertar montos millonarios con el objetivo de adquirir el control de la concursada Vicentin. De esta manera, buscan evitar la quiebra de esta agroexportadora, que enfrenta una delicada situación financiera desde finales de 2019. Los grupos son Commodities SA (Grupo Grassi), Molinos Agro (Perez Companc), Bioenergías Agropecuaria SA, Barbero Cereales SAU y Yabitel SA.
Sin embargo, para avanzar a la etapa final, estas empresas deberán presentar documentación societaria, poderes, domicilio procesal y acreditar su capacidad de oferta. La decisión corresponde al juez de Reconquista, Fabián Lorenzini, quien está a cargo del concurso, y es un paso necesario para habilitar un “cramdown” (salvataje concursado).
Todavía se mantiene la expectativa sobre el número de oferentes, ya que hay tiempo hasta hoy para que se sumen más interesados. La preinscripción mencionada es un “requisito excluyente para la posterior participación en el período de concurrencia propiamente dicho”, aclaró Lorenzini.
La etapa de concurrencia permitirá a estos oferentes evaluar los activos de la firma en plantas como las de Avellaneda, Ricardone y San Lorenzo, y formular propuestas de rescate que incluyan el pago de deudas y el mantenimiento de la operativa industrial. Archivo/Marcelo Manera – Archivo
Lo que viene
En la próxima resolución, el magistrado establecerá los plazos procesales para la inscripción definitiva de quienes estén interesados en adquirir los bienes, “con el pago o depósito del canon correspondiente, la designación del evaluador, la fecha de presentación de la valuación, plazos para las observaciones, audiencia informativa y la determinación de los plazos para la obtención de las mayorías. Esto se realizará sin perjuicio de las eventuales adecuaciones y modulaciones que sean pertinentes, conforme a las circunstancias y las normas que rigen el proceso de salvataje empresarial”.
Sin embargo, como es sabido, Vicentin necesita una oferta viable para cumplir con sus acreedores, debido a un pasivo estimado en más de 1500 millones de dólares.
La etapa de concurrencia dará a estos oferentes la oportunidad de evaluar los activos de la firma en plantas como las de Avellaneda, Ricardone y San Lorenzo, y formular propuestas de rescate que incluyan el pago de deuda y el mantenimiento del funcionamiento industrial.
De acuerdo con las normas vigentes, en esta fase, las propuestas se evaluarán en función de los montos ofrecidos, el alcance (si abarcan la totalidad de activos), el plan de reactivación operativa y la capacidad de gestión. Si ninguna propuesta logra el respaldo mayoritario de los acreedores, Vicentin podría enfrentar una quiebra definitiva.
El juez Fabián Lorenzini, a cargo del concurso de Vicentin ReconquistaHOY
Si se llega a esta última instancia, la agroexportadora, que emplea a cientos de trabajadores y es un nodo clave para la industria aceitera, deberá desprenderse de sus activos, ya que la opción de salvataje por cramdown emerge como la única alternativa viable tras el rechazo de la propuesta concursal previa, calificándola la Justicia santafesina como abusiva e ilegal.
Tras la reunión de una asamblea donde se cerrará el preregistro, se convocará a una audiencia informativa y se fijarán plazos para presentar ofertas económicas y planes de reactivación. Después, los acreedores votarán entre las distintas propuestas basándose en valuaciones oficiales.
Mientras tanto, continúa la disputa judicial, y la Corte Suprema de Santa Fe y la Cámara de Rafaela han validado el paso al cramdown, aunque Vicentin todavía puede apelar, lo que mantiene viva la incertidumbre.
Cabe mencionar que los directores de la empresa, Daniel Foschiatti, Carlos Sartor y Fernando Bougain, siguen apartados provisionalmente de sus cargos, decisión tomada por el magistrado. Por otro lado, los interventores judiciales Andrés Shocrón y Guillermo Nudemberg enviaron una carta de “profundo agradecimiento” al personal de Vicentín, por “el esfuerzo, la dedicación y el compromiso demostrados durante este tiempo”.