
Después de semanas de operaciones turbias e infantiles entrelegisladores de ambas cámaras del Pro, y tras el bloqueo que le hizo el añopasado la oposición a Elisa Carrió -con complicidad de algunos oficialistas-,la comisión bicameral de seguimiento del Ministerio Público pudo votarautoridades y comenzará a trabajar después de una siesta que lleva más de unaño. En la presidencia fue designado el diputado macrista Lucas Incicco,mientras que el senador peronista Pedro Guastavino quedó como vice.
La semana pasada la reunión no pudo ser realizada. Horasantes del encuentro pactado, sorprendió la partida de la bicameral de ladiputada del Pro y secretaria parlamentaria de Cambiemos, la monzoísta SilviaLospennato (Buenos Aires). Sobre la base de ese nombre existía un supuesto acuerdopara que la legisladora fuera votada como presidente de la bicameral, con unsenador PJ como vice.
En reemplazo de Lospennato se designó a Graciela Ocaña, aquien quisieron pegotear como interesada en la presidencia de la comisión ycomo causal de la caída del acuerdo entre macristas y peronistas. Esa operaciónse cayó minutos después, cuando Ocaña negó contactos formales o informales porel comando de la bicameral.
Lo cierto es que el nombre de Lospennato fue el verdaderomotivo de la disputa intra-Cambiemos, e incluso los senadores deslizaron unnombre propio en la presidencia para evitar el arribo de la legisladora. Enmedio de ese trajín, el peronismo se corrió y pidió evitar tropelías para noconsumar un papelón.
Una vez confirmada la partida de Lospennato, y con lapalabra que mantuvo Ocaña desde el principio en cuanto a no solicitar ningúncargo, Cambiemos debía elegir a un diputado en la presidencia. Allí apareció elnombre de Incicco por pedido de Carrió, situación que fue avalada por terminaleslegislativas del jefe de Gabinete, Marcos Peña.
Con el D’Alessio-gate en la bandeja del kirchnerismo,Incicco ausente y Guastavino a cargo de la reunión, el diputado Martín Doñate(Frente para la Victoria) propuso citar al procurador general, Eduardo Casal-sería en junio-, debido a que el funcionario tomó “atribuciones impropias,creando y eliminando cargos y disponiendo traslados”. Además, lo cuestionó porno haber tomado “actuación alguna” respecto de la causa por supuesta asociaciónilícita y extorsión que involucra al falso abogado y al fiscal de la causa delos cuadernos-coima, Carlos Stornelli.
Doñate luego apuntó contra Carrió y la diputada nacional dela CC Paula Oliveto. Según dijo el legislador, ambas “se reunían con D’Alessioen el anexo de la Cámara de Diputados para armar causas truchas con el soloobjeto de persecución a la oposición”.
El “lilito” Juan Manuel López rechazó esas acusaciones yaclaró que Carrió y Oliveto “lo único que tienen” es un proyecto delkirchnerismo que pide su expulsión de la Cámara baja porque, dijo, “le generanuna molestia muy grande al bloque del Frente para la Victoria”.
								
                        
  



