El sábado pasado, el presidente Javier Milei anunció una reducción permanente en los Derechos de Exportación para la carne vacuna (novillo), bajando del 6,75% al 5%. Aunque la medida fue bien recibida, en el sector se la interpreta más como un gesto político que como una mejora real de la actividad comercial.
En la actividad, detallaron que quedan cinco meses de aplicación en lo que resta del año. Durante este período, y considerando un promedio mensual de 300 millones de dólares en exportaciones, la reducción del 1,75% se aplicaría solo al 60% del total, dado que el 40% restante corresponde a carne de vaca que ya está exenta de retenciones. En este contexto, el beneficio directo sería de 15,75 millones de dólares, es decir, unos 3,15 millones por mes, lo que equivale, según cálculos del sector, a 185 toneladas de cuota Hilton.
“El impacto económico es prácticamente nulo en la realidad del negocio”, afirmó el analista Víctor Tonelli. A pesar de considerar positiva la medida como señal política, subrayó que “una mejora del 1,75% tal vez le permita al exportador mejorar su poder de compra o su margen, pero no se va a trasladar al productor ni al precio del ganado”.
Tonelli estimó que, en términos macroeconómicos, el beneficio anualizado alcanzaría entre 32 y 35 millones de dólares. “No es significativo. Si China eleva sus precios en un 5%, eso representaría 50 millones adicionales. Una variación en el precio internacional tiene un efecto mucho mayor que esta reducción en las retenciones”, sostuvo. Sin embargo, reconoció que la medida llega en un momento propicio para la cadena. “Los frigoríficos han comenzado a recuperarse desde abril, y criadores, recriadores y feedloteros actualmente muestran márgenes positivos”, señaló.
De acuerdo con el último informe del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC), entre enero y junio se exportaron 312.647 toneladas de carne vacuna, un 16,4% menos en volumen que el año anterior. No obstante, el valor facturado fue de 1.588 millones de dólares, con un aumento del 11,6%, gracias a la mejora de los precios internacionales.
En este contexto, Tonelli proyectó un panorama favorable para el segundo semestre, con posibles restricciones en la hacienda hacia fin de año si el clima lo permite. “El novillo no va a sobrar, y el mercado interno se mantiene sólido. Preveo precios estables y algo más de competencia en la exportación. Es un buen escenario para todos los actores”, concluyó.
Para Diego Ponti, analista ganadero de AZ-Group, la reducción debe interpretarse como “un gesto político” que no modifica sustancialmente la rentabilidad ni los precios al productor. “Si el frigorífico trasladara completamente ese beneficio, el impacto máximo sería de 100 pesos por kilo de novillo. Sin embargo, los precios de la hacienda responden a la oferta y la demanda, las cuales pueden fluctuar semanalmente”, explicó.
Ponti enfatizó que hay otros factores que afectan más la competitividad, como el tipo de cambio y los valores internacionales. Desde principios de 2025, los precios en China e Israel han aumentado un 16%, y en la cuota Hilton un 21%, en dólares. Además, se ha sumado una devaluación del 7% en el último mes, que ha mejorado la competitividad de la carne argentina frente a Uruguay (5,12 dólares/kg en gancho) y Brasil (4,40 dólares/kg).
Asimismo, el volumen exportado en junio se disparó a 72.000 toneladas, superando las 62.000 de mayo. Según Ponti, esto se explica por un contexto más favorable y la posibilidad —aún no oficializada— de ampliar la cuota de exportación a Estados Unidos, que podría anunciarse próximamente.
El presidente de la Nación, Javier Milei, anunció la baja de retenciones en el acto inaugural de la Exposición Rural de Palermo. Manuel Cortina – LA NACION
Desde Valor Carne, Miguel Gorelik consideró que la disminución de retenciones representa “un avance muy pequeño” y fue recibida con cierta frustración, dado que en el sector existía la expectativa de una eliminación total del tributo. No obstante, reconoció que la medida “ofrece una pequeña mejora en el margen de trabajo para los exportadores”, aunque su impacto sobre los precios será difícil de percibir.
“La exportación ha atravesado un periodo muy complicado, donde estaban desalineados el precio de la hacienda, el tipo de cambio, los derechos de exportación y los precios internacionales, lo que llevó a momentos adversos con márgenes desfavorables. Esto provocó la caída de las exportaciones que se venía arrastrando desde diciembre”, señaló.
“En los últimos meses, los precios internacionales han mejorado sin que hayan cambiado las otras tres variables, lo que permitió un repunte en los embarques durante mayo y junio. Sin embargo, este cambio es muy pequeño. Será difícil de notar en los precios y, de nuevo, los precios estarán más influenciados por la oferta y la demanda que por esta modificación”, añadió.
En cuanto al contexto global, destacó que los precios internacionales han mejorado cerca de un 30% en dólares en comparación con el año pasado, aunque todavía se mantienen entre un 10% y 15% por debajo de los picos alcanzados en 2022. Aun así, evaluó que el mercado internacional se encuentra “en una buena posición”, a pesar de las tensiones comerciales surgidas desde abril. “Los aumentos se registran en casi todos los países importantes que compran carne argentina, aunque en diferentes proporciones”, apuntó.
ASU02-ASUNCION-(PARAGUAY)-10/06/04-Foto de archivo del 18/07/03 del frigorífico Frigo Chaco, en Asunción, Paraguay. El Mercosur debate hoy, jueves, 10 de junio con la Unión Europea un cupo de exportación de carne que podría concretarse si hay un acuerdo entre ambos bloques y permitiría a Paraguay tener una segunda cuota de 7.000 toneladas con mayores beneficios que la Hilton. EFE/Martín Crespo Martín Crespo – EFE
Desde el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas (ABC), Miguel Jairala también calificó la medida como positiva y la sitúo dentro de un proceso más amplio que está impulsando el Gobierno para mejorar la competitividad del sector. Destacó que la rebaja llega en un momento en el que el escenario global presenta aún muchas incertidumbres.
“Si bien los precios internacionales se han elevado desde finales de marzo, en las últimas semanas se ha percibido mayor cautela en China, el principal destino, con ofertas de 200 dólares inferiores a las del mes anterior”, aclaró. A esto se suman factores geopolíticos, como la posible imposición de un arancel del 50% de Estados Unidos a la carne brasileña. “Si EE.UU. penaliza a Brasil, parte de ese volumen se destinará a China y los precios allí disminuirán”, advirtió.
Respecto a otros destinos, indicó que aún no existe un acuerdo comercial con EE.UU., aunque en julio comenzaron a concretarse embarques que habían sido negociados con anterioridad. Europa, por su parte, ha mantenido su ritmo hasta julio, aunque se prevé una pausa debido al receso vacacional. Israel se presenta como el mercado más estable, aunque con volúmenes limitados.
