
Una historia de Informe Digital reveló más que cualquier comunicado oficial. Santiago Caputo, estratega presidencial y principal asesor de Javier Milei, reposteó en Instagram una publicación de este medio sobre la visita del diputado liberal Joaquín Benegas Lynch a Entre Ríos. Minutos después, el posteo fue eliminado, pero la captura quedó.
La nota —titulada: ”¿Benegas Lynch llega tarde, expone a los libertarios entrerrianos o busca adjudicarse un acuerdo ya cerrado?”— planteaba un interrogante que resonó en la escena nacional. Benegas Lynch llegó a Paraná exigiendo el primer lugar en la lista de senadores nacionales, aunque el acuerdo entre Karina Milei y Rogelio Frigerio ya estaba sellado, según coincidieron fuentes oficiales y medios nacionales.
Su visita generó malestar entre los libertarios entrerrianos, que venían trabajando bajo lineamientos acordados con la Casa Rosada. Frigerio, por su parte, evitó pronunciarse, pero su entorno confirmó a TN que la alianza con Karina Milei está firme, incluyendo un esquema consensuado para definir candidaturas.
El movimiento de Benegas Lynch fue interpretado como una jugada personalista, que tensionó el armado y lo dejó en una posición incómoda. No solo llegó tarde a la negociación, sino que se mostró como quien venía a imponer condiciones, lo que contrastó con la línea de trabajo ya trazada desde Buenos Aires.
La reacción de Caputo, al repostear y luego borrar la historia de Informe Digital, fue leída como un síntoma de la interna aún latente dentro de La Libertad Avanza. Según reveló BAE Negocios, Karina Milei lo obligó a reaparecer públicamente en la campaña bonaerense, corrigiendo meses de bajo perfil y roces acumulados.
Así, Entre Ríos volvió a ser territorio donde se transparentan las fracturas del oficialismo nacional. Y la historia que Caputo compartió —aunque por poco tiempo— dejó flotando una pregunta incómoda:
¿Benegas Lynch llegó a sumar o a adjudicarse algo que ya estaba cerrado?.