La Cámara de Representantes aprueba un paquete de recortes de impuestos y gastos propuesto por Donald Trump
Este jueves, la Cámara de Representantes votó a favor de un extenso paquete de recortes de impuestos y gastos presentado por el presidente Donald Trump, marcando una significativa victoria para el mandatario.
El presidente de la Cámara, Mike Johnson, logró la aprobación del paquete en la madrugada, superando una revuelta dentro de su propio partido e impulsando a un Partido Republicano profundamente dividido a respaldar un proyecto de ley que muchos en sus filas aún buscaban modificar.
“¿A veces es bueno que nos subestimen, no?”, comentó Johnson, visiblemente fatigado, durante la sesión plenaria, tras una noche de intensas negociaciones con los miembros más influyentes de su conferencia.
Menos de 12 horas antes, Johnson fue testigo de cómo casi una docena de sus colegas republicanos amenazaban con obstaculizar el proyecto. Asimismo, enfrentó la oposición de centristas que se negaban a apoyar el paquete sin antes obtener grandes exenciones fiscales, fondo que preocupaba a otros miembros más cautelosos del partido. La situación era tan complicada que algunos republicanos ponían en duda que se pudiera aprobar la agenda de Trump antes de la fecha límite impuesta, que algunos consideraron “delirante” cuando fue presentada.
El representante Richard Hudson, de Carolina del Norte y parte del equipo de liderazgo de Johnson, atribuyó la aprobación a la tenacidad y determinación del presidente en lograr un acuerdo esta semana. “Nuestro presidente tiene la paciencia de Job”, dijo Hudson, citando la Biblia para describir a su orador. “Siempre está tranquilo. Siempre es paciente. Es asombroso”, agregó, destacando que “es diferente a cualquier orador con el que haya trabajado”.
La votación final fue de 215 a 214 a favor del proyecto de ley, el cual contiene varias promesas clave de la campaña de Trump. Sin embargo, el camino hacia el Senado se anticipa complicado, ya que los republicanos han indicado su intención de realizar modificaciones adicionales.
La presión para aprobar la legislación en la Cámara puso a prueba tanto la influencia de Trump como la de Johnson. Los líderes republicanos llevaron a cabo exhaustivas negociaciones, y Trump hizo un llamado vehemente a los republicanos para que se unieran a su esfuerzo para aprobar los recortes.
Los líderes del Partido Republicano tuvieron que encontrar un equilibrio entre las demandas de los conservadores y los miembros centristas, un acto delicado dado que Johnson solo podía permitirse unas pocas deserciones en su escasa mayoría.
El paquete legislativo incluye propuestas que recortarían significativamente programas esenciales de seguridad social como Medicaid y cupones de alimentos. Además, busca hacer permanentes las exenciones fiscales para ingresos individuales que forman parte de la Ley de Recortes de Impuestos y Empleos de 2017.
Los republicanos de la Cámara publicaron modificaciones al proyecto el miércoles por la noche para atraer a los reticentes, tales como la aceleración de los requisitos de trabajo para Medicaid y la eliminación anticipada de créditos fiscales de la era Biden, entre otras disposiciones.
La decisión de avanzar con esta votación crucial fue tomada tras un llamado privado de Trump a los principales reacios dentro del partido para que no desbarataran el paquete.
El presidente había convocado a destacados miembros del Partido Republicano a la Casa Blanca en un momento crítico para Johnson, ya que un grupo de conservadores amenazaba con desafiar el liderazgo partidario debido a los recortes de gastos requeridos.
Sin embargo, el miércoles por la noche, el ambiente era de confianza entre Johnson y su equipo, ya que consideraban que Trump había logrado enderezar el rumbo del proyecto de ley. Un día antes, Trump había instado apasionadamente a los republicanos en la Cámara a respaldar su ambicioso plan.
En un discurso de 90 minutos, Trump alternó entre presionar y animar a sus colegas republicanos, acercando a Johnson y su equipo a la aprobación del proyecto, según confirmaron varios legisladores y asesores.
La legislación, que los republicanos han denominado “One Big Beautiful Bill Act” (Un enorme y hermoso paquete de leyes), busca cumplir una variedad de promesas de campaña de Trump y abordar múltiples temas políticos.
Antes de la votación final, los republicanos presentaron un conjunto de cambios al proyecto de ley, reflejo de días de negociaciones para convencer a los miembros reticentes. Entre los cambios, se formalizó el polémico límite SALT, que permitiría deducir impuestos estatales y locales sobre la renta hasta $40,000 para ciertos grupos de ingresos, aumentando desde el límite inicial de $30,000, que no contaba con respaldo suficiente.
Johnson mantuvo discusiones con diferentes facciones para cerrar un acuerdo que convenciera tanto a los conservadores férreos como a los centristas preocupados por algunas de las modificaciones propuestas.
Poco después de la medianoche del jueves, el presidente Johnson se mostró optimista sobre la votación, aunque admitió que “nunca se sabe hasta el recuento final”. “Estoy convencido de que aprobaremos este proyecto de ley esta noche”, aseguró. “Es una legislación monumental con muchos elementos en juego. Veremos qué sucede, pero creo que alcanzaremos este objetivo para el Día de los Caídos, como predijimos desde un inicio”.
