
El abogado Fernando Burlando presentó su renuncia como defensor del exgobernador Sergio Daniel Urribarri, cargo que ejercía desde abril de 2024, cuando se presentó públicamente en una conferencia de prensa. Urribarri fue condenado a ocho años de prisión en el megajuicio, fallo que aún no está firme porque la Corte Suprema de Justicia de la Nación tramita un recurso extraordinario federal pendiente de resolución.
“Por la presente, vengo a formalizar mi renuncia al cargo de defensor particular del Sr. Sergio Daniel Urribarri en la totalidad de las causas en las que he asumido su asistencia”, sostiene el texto de la presentación de Burlando. “Habiendo desarrollado todas las diligencias encomendadas en relación con la defensa técnica del Sr. Sergio Daniel Urribarri, y encontrándose agotada mi intervención en esta instancia y en este fuero, presento mi renuncia a todas las causas en las que he sido designado defensor. En tal sentido, la asistencia legal del mencionado continuará con los distinguidos colegas con quienes oportunamente se asumió la co-defensa”.
En abril pasado ya había renunciado a la defensa de Urribarri el socio de Burlando, Javier Baños.
Burlando había asumido la representación de Urribarri tanto en el megajuicio como en la megacausa por las coimas. Formalizó su dimisión ante la Justicia provincial, por lo que la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA) difundió la notificación correspondiente: “Téngase presente la renuncia formulada por el Dr. Fernando Andrés Burlando al cargo de defensor técnico del imputado Sr. Sergio Daniel Urribarri. Tómese razón. Notifíquese”.
En el megajuicio la defensa del exgobernador continúa a cargo del abogado Leopoldo Cappa; en la megacausa por coimas lo representa Miguel Cullen.
Burlando y su socio Javier Baños habían asumido la defensa en un contexto en que el Ministerio Público Fiscal solicitó que se hiciera efectiva la condena y que Urribarri fuera enviado a prisión.
El exgobernador Sergio Urribarri, su cuñado Juan Pablo Aguilera y el exministro de Cultura y Comunicación Pedro Báez pasaron la Nochebuena de 2024 detenidos en la Unidad Penal de Paraná. Urribarri y Aguilera ingresaron el 19 de noviembre, cuando la Cámara de Casación Penal revocó un fallo de septiembre del año anterior del Tribunal de Juicios y Apelaciones de Paraná y ordenó su detención con prisión preventiva hasta que la condena aplicada en 2022 en el megajuicio adquiera firmeza; la medida fue solicitada por el Ministerio Público Fiscal. Báez ingresó el 22 de noviembre.
El encarcelamiento respondió a un planteo del Ministerio Público Fiscal realizado en abril de 2024, que argumentó riesgo de fuga.
La cuestión fue llevada a la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia (STJ) mediante una impugnación extraordinaria.
La impugnación extraordinaria presentada en 2024 debía ser resuelta por la Sala Penal del STJ, pero los tres vocales no completaron la votación: solo emitieron dictamen los jueces Germán Carlomagno y Miguel Giorgio, y quedó pendiente para después de la feria, en febrero de 2025, el voto de la jueza Gisela Schumacher. Ante esa situación, las defensas de Urribarri y Aguilera solicitaron un pronunciamiento durante la feria y presentaron un recurso el 2 de enero, que fue acogido por el titular del STJ, Leonardo Portela, quien dictó una resolución el domingo 5.
La votación se fijó en el siguiente orden: Germán Carlomagno, Miguel Giorgio y Leonardo Portela. Cuando debió votar, Giorgio pidió su excusación argumentando que ya había emitido pronunciamiento; su petición fue rechazada por un tribunal integrado por Carlomagno, Portela y el juez de Garantías Pablo Zoff. Resuelto ese inconveniente, el tribunal quedó habilitado para emitir dictamen.
La feria se abrió únicamente para tratar los recursos de Urribarri y Aguilera; no así el de Báez.
El 8 de enero de 2025, el Superior Tribunal de Justicia hizo lugar a la impugnación extraordinaria presentada por las defensas del exgobernador —Fernando Burlando, Javier Baños y Leopoldo Cappa— y de su cuñado Juan Pablo Aguilera —Marcos Rodríguez Allende y Miguel Cullen—, y revocó la resolución de la Cámara de Casación Penal que, el 19 de noviembre de 2024, había dispuesto la prisión preventiva de ambos en la Unidad Penal de Paraná.
La resolución fue por voto dividido: Carlomagno y Leonardo Portela votaron por revocar el pronunciamiento de Casación, mientras que Miguel Giorgio se pronunció en disidencia.
Como consecuencia, Urribarri y Aguilera recuperaron la libertad.
El 1° de febrero, al finalizar la feria, un tribunal integrado por las vocales Gisela Schumacher, Carlos Tepsich y Laura Mariana Soage aceptó el planteo de Pedro Báez y le concedió prisión domiciliaria.
(Fuente: Entre Ríos Ahora)