Mendoza no está incluida en el acuerdo entre el Gobierno nacional y los gremios de la Educación por el cual desde el 1º de marzo habrá un piso salarial de $840 para los docentes, tema que precisamente integra la nómina de reclamos del SUTE.
En consecuencia, la solución del conflicto en esta provincia sigue dependiendo de la paritaria y de cuánto se aproxime la propuesta del Ejecutivo al pedido de $100 millones para aumentos que hace el sindicato.
Por ahora la DGE ofrece $64 millones y el SUTE se prepara para no empezar las clases el 6 de marzo.
El secretario general del SUTE, Gustavo Maure, explicó por qué en Mendoza las cosas siguen tal como están. “El acuerdo abarca a las 11 provincias más pobres del país, a las cuales la Nación asiste con el fondo de compensación salarial.
Esto es para que lleguen a un salario mínimo de $840. Esto es así porque por el artículo 5º de la Ley de Financiamiento Educativo las otras provincias, las más grandes -nos incluyen a nosotros- deben responder a la demanda salarial de la ley con propios recursos. Y esto es lo que a nosotros nos hizo rechazar la propuesta que el Gobierno provincial planteó”.




