
Con el viento a favor que le dan los 24,5 puntos arriba enlas Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 14 de abril, elgobernador Gustavo Bordet apuesta a cosechar su reelección el próximo domingo,blindado por un peronismo unido, ante el candidato de Cambiemos, el diputadonacional radical Atilio Benedetti.
El mandatario (en dupla con su ministra de DesarrolloSocial, Laura Stratta) se presenta con el sello del Frente Justicialista CreerEntre Ríos, bajo el cual hilvanó la integración de 11 partidos, incluidas lasexpresiones del kirchnerismo. Una ingeniería que probablemente hará valer en un-a priori- esperable escenario de festejos en la noche entrerriana del domingo,como arquitectura a exportar al plano nacional, en medio de las tensiones en elarmado del peronismo de cara a las Primarias presidenciales del 11-A y lageneral del 27-O.
En línea con el pragmatismo de otros gobernadores del PJ,Bordet apostó a provincializar la elección, por lo que quedará para el post 9-Jla definición de su posicionamiento a nivel nacional, frente al lanzamiento deltándem Alberto Fernández-Cristina Kirchner y de las incógnitas que hoyrepresentan Alternativa Federal y la postulación del líder de Consenso 19,Roberto Lavagna.
Para ello, y a tono con la multiplicidad de la integracióndel frente entrerriano, tiene previsto activar tras los comicios unaconvocatoria a todos los partidos de Creer Entre Ríos, para consensuar unapostura conjunta en materia de alineamientos federales.
Frente a la votación del domingo, en el bordetismo basan suoptimismo en, entre otros ejes, la buena imagen que muestra el gobernador -enbase a, destacan, un modelo de gestión “basado en la producción y eldesarrollo, y no en la especulación financiera, como a nivel nacional”- y en elformato de PJ unido y abroquelado detrás de su candidatura (en 2015 Bordethabía triunfado ante Cambiemos por un margen más ajustado, pero con uncandidato del massismo como tercera fuerza y fagocitándole parte del votoperonista).
En la otra vereda, en la Casa Rosada admiten que marcha enpunta el gobernador, a tono con los triunfos hasta el momento de todos losoficialismos en el desdoblado calendario electoral 2019, lo que dibujó unacadena de once derrotas al hilo para Mauricio Macri.
Tras el duro revés en la PASO del 14 de abril (la pulseadaterminó en 58,15% contra 33.65%), Benedetti coincidió con otros candidatos agobernador de la coalición en la erosión que les generó el ropaje de Cambiemos,que los convirtió en blanco de un voto castigo contra el Presidente desde unaporción del electorado.
Sin embargo, el diputado en los últimos días se mostróconfiado en que “la estabilización de la economía” moderará la nacionalizacióndel sufragio, para concentrarse en cambio en una votación centrada en ejesprovinciales.
Otros tiempos: en 2017, Cambiemos había celebrado un ruidosotriunfo en las parlamentarias nacionales, con el propio Benedetti como cabezade lista.
Con ese telón de fondo, ayer Bordet puso el broche final asu campaña con sendos actos con jóvenes en la costa del río Uruguay -enConcordia- y en la del Paraná, en la capital provincial.
Por su parte, Benedetti -junto a su compañero de fórmula, elintendente de Basavilbaso y titular del PRO provincial, Gustavo Hein- cerróayer la campaña en un club de Paraná junto al intendente radical SergioVarisco, quien busca su reelección.
En la semana había recibido ya los respaldos in situ delministro del Interior, Rogelio Frigerio -juega de anfitrión- y de su par deSeguridad, Patricia Bullrich.
En la polarizada elección a gobernador se definirán además17 senadores provinciales, 34 diputados provinciales, intendentes y concejales.
Sin duda buena parte de la atención estará centrada enParaná, donde se batirán a duelo Varisco -con el sello de Cambiemos, trasganarle la interna al concejal Emanuel Gainza- y el actual vicegobernador deBordet, Adán Bahl.
El antecedente de las PASO juega a favor del peronismo, demanera doble: Bahl fue el candidato a intendente más votado, y su frente -en lasumatoria de sufragios de las líneas internas en juego- cosechó más sufragiosque el de Cambiemos.
La performance alimentó el sueño del PJ de recuperar laintendencia, que Varisco le arrebató a Blanca Osuna en 2015. “El mensaje hasido muy claro: Paraná ha dicho basta, basta de estancamiento y basta denarcotráfico en la ciudad”, disparó por esas horas Bahl, en directa alusión ala causa judicial que investiga supuestos lazos de Varisco con el narcotráfico,por la cual está procesado e irá a juicio oral.









