Miércoles, 6 de agosto de 2025   |   Campo

Baja rentabilidad agrícola, deterioro del suelo y la necesidad de una nueva articulación público-privada en el agro.

Baja rentabilidad agrícola, deterioro del suelo y la necesidad de una nueva articulación público-privada en el agro.

En la inauguración del XXXIII Congreso de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid), que tiene lugar en La Rural bajo la organización de Expoagro, el presidente de la entidad, Marcelo Torres, destacó la necesidad de “repensar y rediseñar” la colaboración entre los sectores público y privado para que Argentina “pueda de una vez por todas crecer, despegar y desarrollarse”. Durante su discurso, abordó el escenario global “desafiante” y las áreas en Argentina que enfrentan “problemas de baja rentabilidad”.

“Hemos pasado de un Estado proteccionista para ciertos sectores, excluyendo el agro, a un Estado burocrático, ineficiente y deficitario que emitía moneda y generaba inflación, a una realidad en la que se busca que el sector privado y el talento florezcan, con un Estado que apoye y sea más eficiente. Todos debemos aprender, ya que hay actividades que requieren una vinculación y articulación público-privada inteligente”, subrayó en su discurso.

“Es imprescindible contar con una estrategia que nos permita transformar este contexto de crisis o desafíos en nuevas oportunidades. El sector privado impulsa el desarrollo de tecnologías, se apoya en una estructura sólida y, con visión, debemos movilizarnos y salir de estas ruinas circulares, citando a Borges, en las que llevamos años atrapados”, agregó.

Después de entonarse el Himno Nacional, entre los asistentes a su discurso se encontraban Jorge Macri, jefe de Gobierno porteño; Sergio Iraeta, secretario de Agricultura, y otros funcionarios y directivos del sector.

Torres describió un panorama agrícola global “desafiante”, marcado por crisis que deberían “servir como motor para repensarnos”. Fue claro al advertir: “Sumado a que en Argentina enfrentamos problemas de baja rentabilidad, hay zonas donde esta es nula, especialmente alejadas de los puertos, o una rentabilidad que no se corresponde al riesgo que asumimos”.

Informó que los productores se ven obligados a “tener empresas cada vez más grandes para ser viables” y resaltó el desafío de “agregar valor” en un marco que “preocupa por el avance de las labranzas”.

“Hoy estamos en un rango de entre el 78 y 80% de siembra directa; en algún momento alcanzamos el 90%. Esa cifra varía mucho por regiones, pero a menudo es el resultado de este combate en el que se encuentra el productor, que no puede mirar a largo plazo”, enfatizó.

Torres también alertó sobre el deterioro del suelo: “No estamos reponiendo ni la mitad de los nutrientes esenciales que nuestros cultivos extraen. Estamos perdiendo carbono orgánico, que es fundamental para mejorar la economía del agua, el almacenamiento, la infiltración y la actividad microbiana”.

En términos climáticos, señaló que los productores han enfrentado “sequías en tres de los últimos cinco años y lluvias extremas”. Añadió que la demanda internacional “exige cada vez más, no solo en cómo se produce, sino también en la sostenibilidad ambiental y social de nuestros productos”.

Para el líder de Aapresid, alcanzar el desarrollo implica coordinar múltiples factores: “Si quisiéramos desarrollar un área con riego, necesitamos un mapa de acuíferos, energía que llegue a los equipos, financiación para esos equipos y rutas para movilizar la producción. A veces es necesario articular un sinfín de variables para que las cosas se materialicen”.

Respecto al avance tecnológico, Torres sostuvo que hay “una gran brecha entre el desarrollo tecnológico y su adopción en el campo”, y que la digitalización permitiría “una agricultura específica para cada sitio, con indicadores rápidos, trazabilidad y captación de valor en el mercado”.

Torres criticó que “el intervencionismo recurrente genera fragilidad” y enfatizó que “la descentralización y la apertura generan antifragilidad”.

En este sentido, reiteró que “debe haber una estrategia” y que todo debe hacerse bajo “código abierto”, con un sector “antifrágil” (el agro), es decir, que “después de un estrés mejora, como nuestro sistema inmunológico o nuestros huesos frente a la gravedad”.

Criticó que “el intervencionismo recurrente genera fragilidad” y destacó que “la descentralización y la apertura generan antifragilidad”. Subrayó: “Nada se impone por la fuerza; no podemos lograr resultados si no nos comunicamos”.

En su discurso, comparó la evolución del sector con Brasil: “En los últimos años, su superficie creció 14 veces, mientras que Argentina solo lo hizo cuatro. No tuvo retenciones, ni cerró exportaciones, sin importar quién estuviera en el gobierno”. Adicionalmente, consideró que la propiedad intelectual “debe estar en la agenda” y que son debates “complejos, pero necesarios”, siempre “en un marco de buenos diálogos”.

Durante el acto, también se dirigió a los presentes Iraeta, quien afirmó que el Gobierno busca “que se produzca más y mejor” y que las medidas anunciadas por el presidente Javier Milei sobre la reducción permanente de retenciones a los granos y a la carne bovina y aviar fueron “un alivio muy importante para el campo”.

“Vamos a cosechar en un país mejor”, dijo Iraeta.

“El Gobierno está facilitando el trabajo en el campo. Estamos en camino a brindar más alivio al sector agropecuario. Lo único que les pido es que esta campaña siembren con el mismo espíritu y empeño con el que lo hemos hecho toda la vida los productores agropecuarios. Estoy seguro de que vamos a cosechar en un país mejor”, expresó Iraeta.

Por su parte, Macri declaró: “Si al sector privado le va bien, a Argentina le irá bien. No hay un país posible y exitoso si quienes emprenden, invierten, asumen riesgos y desarrollan no tienen éxito. Necesitamos varios años sostenidos para recuperar la cultura del éxito privado”.

El XXXIII Congreso de Aapresid se llevará a cabo hasta el viernes y reúne a productores, técnicos y empresas para debatir sobre innovación, sostenibilidad y los retos de la agricultura argentina.

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