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Jueves, 20 de noviembre de 2025

Axel Kicillof acusó a Javier Milei de querer reflotar el Consenso de Washington

Axel Kicillof acusó a Javier Milei de querer reflotar el Consenso de Washington

El mandatario bonaerense participó este jueves del cierre de la Semana de la Integración Federal durante la nueva edición del Programa Federal de Formación “Gestión para el Desarrollo” de la Escuela Federal de Desarrollo. Allí estuvo junto a Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Alfredo Cornejo (Mendoza), Claudio Poggi (San Luis) y Carlos Sadir (Jujuy) con quienes compartió mirada sobre la importancia del diálogo y el consenso en el escenario político actual.

Kicillof arribó al Goldencenter con el encuentro ya iniciado y se exculpó por la demora. “Tuve una mañana con varios accidentes por temas de gestión”, se justificó ante la mirada de los restantes jefes provinciales y del Secretario General del CFI, Ignacio Lamothe, articulador del evento y participante del bloque de debate.

El jefe bonaerense tomó la palabra ante un auditorio colmado que se dio cita para presenciar el plato fuerte de la actual edición. Ante ese escenario, ensayó un análisis sobre la importancia de los consensos, aunque aprovechó para cuestionar recetas del pasado que, apalancadas sobre acuerdos transnacionales, implementaron medidas que, a su criterio, fueron nocivas para el país.

Kicillof aseguró que actualmente el mundo atraviesa una etapa de “transición” en la que se intentan imponer recetas del pasado aggiornadas al contexto actual. En ese sentido, hizo mención a lo que fue el “Consenso de Washington”, una serie de políticas desreguladoras que se aplicaron en Argentina a pedido de EEUU en la década de los ´90, y que, según consideró, Milei busca reimpulsar.

Axel Kicillof junto a Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Alfredo Cornejo (Mendoza), Claudio Poggi (San Luis) y Carlos Sadir (Jujuy)

“En los 90 había un manual de instrucciones conocido como el Consenso de Washington sobre desregulación, flexibilización laboral, privatizaciones y apertura de importaciones. Eran recetas sobre lo que había que hacer en los países en vías de desarrollo. Con ese manual, los países se iban a desarrollar, pero eran recetas equivocadas”, cuestionó.

Esas iniciativas se basaban en a la desindustrialización, según afirmó el gobernador. “Acá se aplicó a rajatabla”, recordó y afirmó que el resultado de la implementación del Consenso de Washington “fue más pobreza y destrucción de capacidades”.

En ese sentido, hizo un paralelismo con las medidas desregulatorias que impulsa Milei y su equipo económico. “Ahora el Consenso de Washington se propone como Sistema Austriaco”, afirmó respecto a la propuesta que empuja el mandatario nacional, sostenida sobre la línea dura de la ortodoxia económica. Y cuestionó: “A veces con mentiras nos quieren convencer de modelos”.

Para el administrador bonaerense, la apertura del mercado local a la importación trae como correlato la desindustrialización y, por consiguiente, la primarización de la economía. Pese a destacar que Argentina, y en particular Buenos Aires, cuentan con recursos naturales variados, Kicillof señaló que “no alcanza para tener desarrollo”. “Hace falta industrializar”, sentenció.

“Es necesario industrializar y sumar valor agregado para que haya bienestar para los argentinos y no para las corporaciones y los intereses extranjeros”, apuntó y remarcó: “Lo que importa es que la riqueza esté bien distribuida. Hay que pelear por el desarrollo de la Argentina”.

Respecto al core de la charla, el jefe bonaerense destacó que la política “es consenso”, pero también recalcó que “implica dar debates y participar en disputas”. “Hay que hablar de desarrollo con objetivo federal, nacional y con equidad para todos y todas”, recalcó.

Diálogo, consenso y desarrollo

A su turno, el gobernador de Mendoza, Cornejo, se refirió a los desafíos que enfrentan los países democráticos a la hora de poner en práctica políticas económicas y sociales que sintonicen con el contexto. “Es un gran desafío poder desarrollar el país en democracia. Algunos autoritarismos logran resultados económicos más rápido y muchas democracias no lo estamos logrando”, reconoció.

En ese sentido, aseguró que “se puede lograr si tenemos altos niveles de consenso sobre objetivos comunes”, pero remarcó que “es necesario el profesionalismo de la política con objetivos comunitarios y sociales”. “Eso se logra con dirigentes que tengan claras las ideas y su plataforma”, dijo y acotó: “Hoy garpa mucho no venir de la política, pero si la política es profesional las democracias van a tener los objetivos más claros”.

Frigerio, a su tiempo, habló de la complejidad de administrar una provincia, principalmente en materia de desarrollo. “Cada provincia tiene una realidad distinta. No se puede gobernar lo que no se conoce. Tenemos muchas restricciones para el desarrollo. La más obvia, la infraestructura”, planteó el jefe entrerriano y enumeró también la composición de la política impositiva. “La distribución de los recursos en lo que falta trabajar mucho entre la Nación y las provincias”, señaló respecto a la articulación con el Estado nacional.

Respecto al rol de la política, consideró que es necesario construir “un camino alternativo para que la política resuelva problemas concretos en cada uno de los lugares” y que la política “sea un igualador de oportunidades”. “En esta construcción de consensos hay mucho trabajo por delante”, aseguró.

Por su parte, el gobernador de San Luis no dudó en afirmar que la riqueza de un país “no pasa por más recursos naturales sino por el capital humano”. “Uno puede tener petróleo, pero hay que saber sacarlo. La educación es clave”, remarcó en sintonía con Kicillof, quien previamente había planteado su defensa de la universidad pública.

Consultado sobre las reformas que impulsa Milei, Poggi evitó exponer su posición. “Hoy venimos a hablar de integración”, eludió el puntano. Luego se refirió a los liderazgos al señalar que deben ser “positivos” y “que motiven a trabajar en equipo”.

El secretario general del CFI, Ignacio Lamothe, recalcó que para lograr que la agenda de desarrollo se sostenga en el tiempo es importante una construcción colectiva. “El desarrollo no es un destino al que se llega de manera individual, sino una tarea que se construye entre muchos, conversando, planificando y trabajando con propósito. Argentina tiene futuro, pero ese futuro se vuelve real cuando logramos transformar la esperanza en acuerdos y los acuerdos en políticas concretas que mejoren la vida en cada provincia. El desafío es construir juntos una hoja de ruta que nos marque un rumbo compartido”, cerró.

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