
En las últimas horas del 23 de diciembre, el Concejo Deliberante de Coronel Suárez, en el sudoeste bonaerense, aprobó por mayoría el proyecto fiscal impositivo que aumenta un 10% la tasa de la red vial, amplía al 94% la libre disponibilidad del tributo y suma un impuesto del 2% sobre los combustibles vendidos en el distrito. La iniciativa, impulsada por el oficialismo afín al intendente Ricardo Moccero —en el cargo desde 2019 y aliado del gobernador Axel Kicillof— obtuvo siete votos a favor, ocho en contra y una abstención; se definió con el doble voto de la presidenta oficialista, Andrea Acosta.
A principios de este mes, los productores habían calificado a la iniciativa de “un atropello institucional”, ya que, según dijeron, “no hay caminos” en el partido. Según los referentes del sector, el Concejo Deliberante sesionó a último minuto para darle aprobación al proyecto.
La iniciativa también fue rechazada por la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap). “Decimos no a la tasa del 2% sobre los combustibles y a la sobretasa del 10% para Vialidad Rural. Más impuestos es menos producción y trabajo”, dijeron en la entidad.
Según señalaron los productores que estuvieron en el Concejo Deliberante, la sesión se inició tarde. El concejal Alejandro Benz (ex LLA), ahora aliado al intendente, dio el quórum necesario para que la sesión se lleve a cabo.
Productores presentes durante la votación en el Concejo Deliberante
“La tasa a los combustibles existe en otros distritos, pero también hay jurisprudencia de recursos de amparo avalados por la Justicia; y de la sobretasa del 10% sobre la tasa vial, de la que se ejecuta parcialmente y con muy mala gestión, es de libre disponibilidad para cualquier destino arbitrariamente”, indicó José Ignacio Ansaldo, un productor en el recinto.
Los productores también se focalizaron sobre un 94% de libre disponibilidad de la tasa que va a rentas generales y un 6% restante para salud. Dijeron que lo que llega a una Comisión Vial es discrecional. La ordenanza municipal vigente hasta esta fecha indicaba que el 70% de lo recaudado por tasa vial debía ir a la Comisión Vial. Hoy se pagan en promedio $1000 por tasa, pero con lo aprobado en 2026 ese monto pasará a ser de $6000 en el primer trimestre, $8000 en el segundo y $9000 en el tercero, por tasa. La tasa vial aumenta por cuatrimestre.
Ansaldo cuestionó el paquete impositivo y advirtió que, en rigor, el impacto de las subas de las tasas generales oscila entre el 100% y el 500%. Según explicó, el intendente volvió a instaurar una sobretasa que había sido eliminada anteriormente: se trataba de una tasa solidaria sobre la tasa vial destinada al hospital, llamada “tasa de salud” y creada durante la pandemia. El Concejo anterior la derogó, el intendente la vetó y, con la nueva conformación del Concejo, la reincorporó en la ordenanza impositiva aprobada recientemente.
Los caminos rurales de Coronel Suárez
Remarcó que los fondos de la tasa vial no tienen un destino específico. “Es de libre disponibilidad; se puede usar para cualquier fin y destino”, subrayó. Del 70% de libre disponibilidad que había, la cobrabilidad se calculaba en un 80%, o sea que en la práctica se ejecuta un 56%. “Hay un desorden administrativo y una planta de personal enorme que sigue aumentando año a año y que es insostenible”, sostuvo.
Ansaldo cuestionó que la tasa del 2% sobre los combustibles, que presuntamente se va a destinar al mejoramiento de la red vial urbana, solo se aplicará en la ciudad cabecera, Coronel Suárez, y en los pueblos aledaños, aunque en la práctica la pagará todo el partido. En ese sentido, advirtió que localidades como Villa Arcadia, Pasman, Curumalán y Guaminí no están incluidas en el proyecto. “No van a recibir obras, pero sí van a estar pagando esa tasa”, apuntó.
Con el voto doble de la presidencia, el oficialismo aprobó la ley fiscal impositiva en Coronel Suárez
María José Camiña, productora de la zona, señaló: “La tasa vial rural, en la práctica, es de libre disponibilidad para el intendente. La sobretasa durante la pandemia fue aceptada, pero hoy no se ve en qué se invirtió una vez pasada la emergencia sanitaria”, afirmó.
Para ella, la tasa sobre los combustibles significa mucho dinero en el Municipio: “Si bien el porcentaje es bajo, a este intendente, y con mayoría en el Concejo, le abre una puerta para ir aumentándolo a su antojo. Nunca se logró que presentara una rendición de cuentas que justifique los aumentos. Sabemos que no utiliza el dinero para el destino para el que se recauda; hace tiempo que no se aplica la sobretasa para salud”.
Los productores asistieron a la sesión del Concejo Deliberante
Fernán Castilla, vecino de la zona, añadió que el aumento es “un disparate” y no lo aceptan. “El 2% no es un aumento, sino una imposición, porque no existía. Afecta a los que menos tienen: el chico que va a cortar el pasto con una bordeadora, el remís, y no solo a los productores, sino a la población en general”, indicó.
Agregó: “Es una medida populista, o mejor dicho, un populismo al revés, porque afecta a todo el mundo, como ocurre con toda suba de impuestos. No entienden que perjudican a toda la población: aunque sea un 2%, no importa el destino o el uso, todo el combustible va a pagar un 2% más por una tasa que no tiene contraprestación”.
Pese al intento de LA NACION, desde el gobierno municipal no respondieron una consulta sobre el tema.
Los caminos rurales de Coronel Suárez




