
SANTA FE.- Cesaron las lluvias pero en el “manchón” de agua que cubre el extremo sur de esta provincia, el norte de Buenos Aires y el sudeste cordobés, hay que esperar, según dicen los productores. Que el agua baje demandará al menos cuatro días. Y que un porcentaje de la lluvia acumulada se evapore hoy es algo difícil por las bajas temperaturas. Se estima, aunque falta la evaluación de técnicos que siguen el tema para distintas organizaciones de la producción, que habría unas 700.000 hectáreas afectadas por la tormenta de Santa Rosa en las provincias citadas.
En Santa Fe, el epicentro de la emergencia sigue siendo la zona urbana y rural del departamento General López, próximas a la provincia de Buenos Aires, donde el cuadro que describen los productores es el denominador común de la región afectada: napas subterráneas altas y falta de escurrimiento rápido.
Todo ello genera, en los lotes sembrados con trigo, la incertidumbre sobre lo que finalmente ocurrirá con la actual campaña. Pero los productores también advierten que peligra el comienzo en tiempo y forma de la siembra de maíz temprano y girasol, porque por varias semanas no habrá posibilidades de ingresar a los lotes para realizar los trabajos iniciales de laboreo, lo que podría derivar en un corrimiento del interés de los productores hacia soja y maíz de segunda.
Laura Llopi, titular del Consejo Asesor Regional Santa Fe de Coninagro, vecina de María Teresa, epicentro del fenómeno que afectó al sur santafecino, con 260 milímetros, explicó que “recién este martes se puede observar que el agua comenzó a retirarse del ejido urbano, pero lo que sucede en los campos no podemos comentar nada porque todos los caminos de tierra están cortados, muchos de ellos anegados de alambrado a alambrado”.

“El panorama en la zona rural, de los distritos María Teresa, Christophersen y La Chispa (departamento General López) es alarmante”, resumió ante LA NACION. La productora rural señaló que “el agua acumulada es como estar viendo un mar porque para el lado que se mire hay agua”.
Llopi ratificó que las mayores dificultades se observan en los cultivos sembrados con trigo, pero aclaró en forma enfática que “es muy prematuro evaluar las pérdidas porque el agua en los caminos va de alambrado a alambrado y es imposible llegar a los campos”. Agregó: “Para una correcta estimación de los daños tenemos que esperar que baje el agua y ver cómo se comporta el cultivo y en muchos casos las pasturas”.
Ante una consulta, explicó que, “si bien esta no es una zona ganadera por excelencia, quienes tienen hacienda están muy complicados ya que las pasturas y los rollos (forrajeros) están bajo agua y las vacas permanecen en lomadas y en muchos casos sin alimentarse ni descansar”.
En este marco, un informe de la Dirección de Riesgo, Seguro Agropecuario e Instrumentos Impositivos, Financieros y Fiscales de la Dirección Nacional de Riesgo y Emergencias Agropecuarias de la Secretaría de Agricultura puso de relieve que, luego de las fuertes precipitaciones que se dieron en el marco de la tormenta de Santa Rosa, se expandieron las zonas productivas con excesos hídricos. Además, el reporte indicó, en base a datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), que agosto finalizó con marcas históricas para este mes.
“Se generalizan los excesos estimados en lotes de trigo, especialmente en el sudeste de Córdoba, norte de Buenos Aires y centro y sur de Santa Fe”, precisó el relevamiento oficial. Según consignó, en materia de precipitaciones se registraron acumulados de más de 100 mm en el centro de la región pampeana. Ejemplificó con estos datos: 155 mm en Marcos Juárez, 139 mm en Diamante, 129 mm en Venado Tuerto, 102 mm en Los Toldos, 101 mm en Sauce Viejo.
Indicó que, en base a un mapa de precipitaciones, allí se observan “excesos generalizados en el sudeste de Córdoba, centro y sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires”. Agregó: “También predominan los excesos en Entre Ríos y sudeste de Buenos Aires”.
Remarcó que el centro de Córdoba, que presentaba “condiciones deficitarias de agua en el suelo, las recientes precipitaciones permiten observar reservas adecuadas a óptimas en lotes de fina”.
El análisis dio cuenta de muchas regiones con lluvias que marcaron un récord para agosto. “En Venado Tuerto, por ejemplo, se sumaron 199 mm en agosto de 2025, mientras que el máximo de la serie histórica era de 101 mm, medidos en agosto de 2015”, dijo.
En este contexto, en Los Toldos, Buenos Aires, agosto de este año registró 270 mm, por encima del máximo de 131 mm de agosto de 2001. En Marcos Juárez, en el sudeste de Córdoba, también se rompió un récord: los 196 mm del mes pasado superaron a los 117 mm de agosto de 2012. Entre otros casos, en Laboulaye, también en Córdoba, agosto de 2025 marcó 131 mm, muy superior a los 106 mm de agosto de 1976.