Según lo consignado por el secretario de Turismo, Juan Carlos Laurencigh, se trata de cifras récords superiores a las registradas en las últimas décadas. El gran factor de convocatoria fue la Fiesta de Disfraces que generó un movimiento de más de 30.000 personas, y muchas más considerando las que permanecieron en las inmediaciones sin ingresar al predio. El fin de semana largo fue el marco que benefició la llegada de visitantes desde el viernes, hasta el lunes 16. Numerosas alternativas artísticas, culturales, recreativas, así como los atractivos permanentes de la capital entrerriana fueron el complemento de la propuesta turística que generó un movimiento excepcional tanto en económico como en el desplazamiento hacia Paraná de 28.000 viajeros. La mayor parte de los visitantes fueron provenientes de las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. El secretario de Turismo de Paraná puso de relieve el trabajo que se viene verificando en el área, así como el crecimiento de alternativas para el turista. Según Laurencigh, la ciudad vivió un fin de semana histórico en materia de actividad turística. El movimiento en la capital entrerriana se vio reflejado en los diferentes sectores públicos de la ciudad, principalmente en la zona costera así como en los establecimientos gastronómicos, que experimentaron un alto movimiento. La positiva situación que Paraná celebra, es una confirmación de lo que había anticipado la semana anterior el ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer. El funcionario nacional citó a Paraná como uno de los destinos nacionales elegidos por los turistas para el fin de semana largo en el marco de un crecimiento del 11 por ciento del movimiento nacional respecto del período similar del año anterior. Actividades como Teatro por la Identidad, la Fiesta Flotante en uno de los catamaranes, el Encuentro Nacional de Grupos Vocales, la fiesta “Hoy chau” y la Feria de Microemprendedores y Artesanos integraron también la grilla del fin de semana en la capital de Entre Ríos. La edición 11º de la Fiesta de Disfraces se caracterizó por el record de público, su originalidad en los disfraces y, por primera vez, se presentó el "disfrazódromo", una extensa pasarela de entrada a la que acudieron miles de personas para observar el colorido ingreso de los participantes.